El candidato a intendente de Lanús por Unión por la Patria, Julián Álvarez, explicó por AM750 los principales puntos de su plataforma electoral y se diferenció del plan de Néstor Grindetti - el actual intendente - y Diego Kravetz - aspirante de JxC -, a quienes acusó de buscar convertir el distrito en un “galpón de la Capital Federal”.
Esta dura crítica la hizo al referirse al mal estado del municipio en comparación a sus distritos vecinos, a pesar incluso de contar con el mismo presupuesto. Y lamentó que en los últimos años Lanús pasó de ser un municipio industrial a un mero lugar de "depósitos y logística".
“Acá hay una cuestión que tiene que ver con el modelo de ciudad de la Capital Federal que busca que Lanús sea su galpón. Y nos gobierna alguien que es de Capital Federal. Ver a Kravetz caminando las calles de Lanús con un chaleco antibalas es triste. No duerme acá, no viva acá”, comentó entrevistado por Diego Brancatelli.
En este contexto, planteó que “Lanús necesita de mucho afecto, resolver las bocas de tormentas rotas y los más de 500 basurales a cielo abierto". "Las calles están todas rotas porque tienen todas las napas pegadas al piso y están llenas de camiones", continuó. Además, remarcó que los habitantes d ela ciudad no están en condiciones de que "alguien de Capital Federal venga a querer gobernar el distrito.
Esto se explica en números más que crudos. Por ejemplo, ante una comparativa rápida con Avellaneda, con presupuesto idéntico, remarcó que el distrito vecino "tiene 16 polideportivos gratuitos y en Lanús no hay ninguno". "En Avellaneda tenes 24 jardines maternales municipales y en Lanús uno sólo”, lamentó. “El presupuesto es el mismo y vos ves cómo está uno y otro", comparó.
Parte de esto se explica, según Álvarez, en cómo se invierte mal la plata en Lanús. “El municipio gasta 500 millones en pauta para que no salga el nombre en los medios. Tenemos 200 paradas de colectivo, podríamos tener todas paradas seguras. O controlar los accesos a la ciudad con detector de patentes”.
Por eso, finalmente, se lamentó: “Es triste. Porque Lanús hace 30 años estaba mejor que Avellaneda. Y eso se debe al abandono de la gestión municipal. No solo de Grindetti”.