Por unanimidad, la Justicia condenó a prisión perpetua al autor del femicidio de Romina Saavedra, apuñalada y quemada en diciembre de 2013, en San Lorenzo. El llanto de desahogo de sus hijos adolescentes, padres y hermanos se hizo sentir en la sala donde el juez Ismael Manfrín leyó el fallo que sentenció a Miguel Angel Pastorutti, en acuerdo con sus pares Julio Kesuani y Edgardo Fertitta, tras una semana de debate oral y público. El rol de la fiscal Cristina Herrera fue determinante en la causa proveniente de San Lorenzo para que se avale el agravante de femicidio y lleve la condena al máximo de ley. Tal cual el pedido acusatorio, los jueces ponderaron el "homicidio triplemente calificado por haber mediado relación de pareja y violencia de género", en concurso real con "amenazas coactivas" en dos hechos que Romina llegó a denunciar cuando nadie la escuchaba, en 2012. "No esperábamos menos. Es terrible todo lo que le hizo a mi hija, incluso antes de matarla", dijo Osvaldo, tras le veredicto.

"Lo que nos interesaba era que se apreciara en la prueba que esto fue una cuestión de género y el tribunal le dio los tres agravantes. Estamos satisfechos", dijo la fiscal Herrera, que fue más allá en sus consideraciones sobre el flagelo de la violencia machista, que este año suma 20 víctimas en la provincia, según el relevamiento del equipo de género de la concejala Norma López: "Tenía denuncias previas que fueron acreditadas y todos los testigos dijeron que él era famoso por haber ejercido violencia contra otras mujeres. Las denuncias de Romina dieron lugar a otras causas que no habían tenido asidero al momento. Cuando se las imputaron al agresor, ella estaba muerta hacía cuatro meses. A eso me refiero cuando hablo de una falla en las instituciones. Hay un eslabón roto entre la denuncia y el femicidio. En el camino quedan muchas Rominas. Ella no recibió la ayuda y no se pudo detener a Pastorutti cuando prometió matarla", dijo la fiscal y destacó que el tribunal estuvo compuesto por tres jueces varones.

La familia de la víctima estuvo acompañada por organizaciones de mujeres, a lo largo de las audiencias. El hijo de Romina, Sebastián contó en el juicio el calvario que vivió la mujer de 32 años. "Hoy nos vamos conformes", dijo ayer.

Romina Saavedra fue asesinada el 9 de diciembre de 2013 en el interior de la casa del acusado. En sus alegatos, la fiscal Herrera habló de violencia machista y de cosificación. "Para el agresor Romina era una cosa, como cualquier objeto material que le pertenecía. La esperó y preparó todo para llevar a cabo su plan. La arrastró hasta su casa de los pelos. Dejó abierta la cocina y tres garrafas preparadas. Ahí la tenía, a su merced, encerrada. Quería evitar que quede viva, se tiró encima del cuerpo de Romina y le asestó 25 puñaladas. No dejó que le sacaran a su presa, su mujer, su objeto. Antes que eso, la mató".