"Hago este video para ratificar noticias que están circulando respecto a juicios de los cuales debo ocuparme. Primero, un juicio dirigido a recuperar el dominio de la casa donde nací y viví casi toda mi vida, de la que, a través de un engaño de escrituras tramposas, se ha apoderado mi hija Laura y un grupo de personas que se dicen ser representantes del club San Lorenzo de Almagro". El video en el que Norberto Galasso, a los "87 años y medio", cuenta el triste trance por el que está pasando, circuló rápidamente y generó una ola de repudio a la situación y apoyo al historiador y militante.
Hay otro juicio, cuenta allí también con su enorme biblioteca como fondo, y es el que lo angustia por estas horas, "a esta edad avanzada y con problemas de salud": "Otro juicio que se origina en que ellos han obtenido dinero en préstamo dando como hipoteca esta propiedad, en la que vivo con mi hijo Gustavo. Llegado el momento de devolver ese dinero no lo hicieron, los acreedores hipotecarios iniciaron un juicio dirigido al remate de la propiedad. Esto ha avanzado y existe el peligro de que avance el remate de la propiedad, y el desalojo".
"Sí, mi casa de siempre, la de Parque Chacabuco", ratifica en diálogo con Página/12 el autor clave del revisionismo argentino, ese lugar en el que se le han hecho tantas notas. "Donde vivo desde mis 8 años, cuando mis viejos compraron esta propiedad. Donde viví toda mi vida, excepto los quince años de casado. Donde hoy vivo con mi hijo y tengo todos mis libros". Es una antigua propiedad que incluye dos departamentos (en uno vive actualmente con su hijo, otro solía usar su hija) y un local de comercio.
Cuenta de un traspaso que hizo a su hija María Laura Galasso, que es psicóloga, en 2009. "Ella me dijo que lo necesitaba para asentarse en la vida y sentirse más segura, me habló una terapista de ella también, era algo que la iba a ayudar en un momento difícil que estaba pasando. Yo inocentemente creí que era para hacerle un bien, y que se trataba solo del departamento que usaba ella. Desde luego no hubo un peso de por medio y resultó que se refería al total de la propiedad. Nunca hubiera imaginado que todo iba a terminar así", relata Galasso padre a Página/12.
Cerca del historiador cuentan que hubo, en todos estos años, situaciones de amenazas repetidas, incluso a los abogados, hasta un disparo en el pasillo de su casa, que lo llevaron, junto con su hijo, a iniciarle un juicio por violencia familiar a su hija. "Mi hija tiene una relación muy cercana con la barra de San Lorenzo, han creado una suerte de asociación ilícita", denuncia el historiador. Los abogados patrocinantes de la hija, por su parte, aseguran que esa violencia fue inversa, hacia ella.
"Laura se ha preocupado de seguir esas causas con mucho interés, hubo varios abogados, aunque han ido renunciando. En cambio, a la intimación por la hipoteca la dejó correr, no actuó en absoluto. Y Norberto se enteró de que existía esa hipoteca y ese peligro de desalojo y remate el 29 de septiembre pasado, cuando llegó el aviso a su casa", dice su abogado, Emiliano Rodríguez.
Asegura que en el juicio de nulidad, que se inició en 2020 y actualmente está en su etapa probatoria, puede demostrar que no tenía ingresos para comprar esa propiedad, y que fue un acto simulado para perjudicar patrimonialmente a su padre y a su hermano. La defensa de la hija insiste en que la escritura es válida. Mientras tanto Galasso sobrelleva esta situación con notoria pena en sus palabras: "A los 87 años y medio que tengo no estoy para un enfrentamiento de este tipo, como si hubiera perdido a mi hija, porque es otra persona. Con mi hijo estamos haciendo lo posible para que todo esto se solucione y recuperar algo paz".