El Concejo transita hacia la última sesión ordinaria del año, este jueves, en la cual la principal definición será la elección de autoridades para el 2017. A priori, muchos consideran que la radical Daniela León renovará su mandato como presidenta por un año más, si consigue retener el apoyo alcanzado el año pasado, cuando derrotó a su correligionaria María Eugenia Schmuck con votos del bloque Unión PRO, los socialistas, dos kirchneristas y el Partido del Progreso Social. Por lo demás, todos los temas calientes que aguardan en la agenda política de la ciudad seguirán en sus carpetas al menos por dos semanas más: el oficialismo aún no construyó ‑-y la oposición tampoco le cedió-‑ el consenso suficiente ni para aprobar el presupuesto ni la autorización de endeudamiento. En parte, porque antes debe desanudar y dejar fluir la aprobación de la nueva ordenanza de regulación de locales nocturnos y bares culturales y la definición del pliego para licitar el año próximo la concesión del estacionamiento medido. Una cosa facilitará la otra; pero hasta ahora eso no ha sucedido.
El jueves se realizará la última sesión del período ordinario, antes los ediles celebrarán una preparatoria en la que se elegirá al próximo ‑o próxima‑ titular del Concejo. Entonces todos bajarán las cartas e insinuarán el mapa de pactos y acuerdos que regirá el Palacio Vasallo en los próximos doce meses. El mandato de León en la poltrona mayor del recinto vencerá el 9 de diciembre, por lo que la elección debería hacerse el jueves 8. Pero como la fecha coincide con el feriado y fin de semana largo es que tal definición se anticipó para este jueves.
Distintas fuentes coinciden en avizorar casi con certeza que la edila del bloque Unión Cívica Radical volverá a desplegar su capacidad de tejer acuerdos como para asegurarse otro período como presidenta. Para eso estuvo con el teléfono caliente y manteniendo reuniones con ese objetivo. Los conocedores del paño descuentan que en el Frente Progresista validarán su mandato, pero no así los dos radicales del bloque Radicales Progresistas, María Eugenia Schmuck y Sebastián Chale. Asimismo, León ha renovado la relación con los cinco ediles del PRO, que bien le sirvió al Ejecutivo municipal en muchas votaciones clave. Y además, trata de ganarse otra vez el favor de las bancas kirchneristas. El año pasado la votaron Eduardo Toniolli y Marina Magnani, también Lorena Jiménez (PPS), pero no así Norma López ni Fernanda Gigliani, que lo hicieron por Schmuck.
Más allá del pronóstico favorable a León, circula la versión de que hubo en el espacio opositor conversaciones sobre el asunto, y que asomó cierta iniciativa por presentar batalla y oponerle a la oficialista un candidato capaz de disputarle la presidencia y, luego, arrebatarle al Ejecutivo la confección de la agenda en el Concejo. La propuesta emergió en el mosaico de ediles peronistas que hay en el Concejo, atomizado en diversos bloques. Los alienta, además, la sorpresa que ayer el PJ le propinó al Frente Progresista en Santa Fe, donde el radical Leonardo Simoniello perdió su lugar como presidente del Concejo, a manos del justicialista Sebastián Pignatta, apoyado por el arco opositor, lo mismo que Alejandra Obeid (PJ), elegida como vicepresidenta 2ª del Concejo santafesino (ver página 3).
Con todo, un edil observó, en off the record, que las preferencias en el Palacio Vassallo no se definen tanto por lo ideológico sino por conveniencias más prosaicas, como la asignación de cargos y de lugares en las comisiones de trabajo parlamentario. Y esas alquimias pendientes explican que todavía no estén definidos los asuntos calientes, esos cuya definición Mónica Fein espera.
El Concejo todavía no aprobó el Presupuesto 2017 con el cual el Ejecutivo municipal deberá gobernar el año próximo. Un aspecto clave en este sentido es la autorización solicitada por la intendenta para tomar deuda en el mercado de capitales por hasta 200 millones de dólares, en parte para obra pública, pero también para cancelar vencimientos de préstamos contraídos años atrás; es decir, sería un canje de deuda y allí la oposición se planta en negativa. Este jueves no se hablará de esto en la sesión. Los concejales estiman que lo harán en una de las dos sesiones extraordinarias que habrá en diciembre.
Otros dos proyectos que aguardan ver la luz son la nueva ordenanza que debe regular el funcionamiento y reglamento de los locales de diversión nocturna, y la definición de los pliegos para la nueva concesión del estacionamiento medido, que vencerá en abril del año próximo. Todos son temas de alta polémica cuyo prólogo empezará a bosquejarse el jueves, cuando la elección de autoridades redefina las alianzas en el Concejo para el año venidero.