La Cámara del Crimen ordenó la detención inmediata del cirujano Aníbal Lotocki, en el marco de la causa por la muerte del empresario Rodolfo Cristian Zárate, operado en su clínica en 2021, al considerar que hay elementos que permiten acreditar el riesgo de que el imputado se fugue o intente entorpecer la investigación.
La decisión fue adoptada por la sala IV del tribunal de alzada, que ayer le había confirmado el procesamiento por homicidio simple de Zárate, quien murió el 15 de abril de 2021 en una clínica de Caballito luego de ser operado por Lotocki, a quien también se le imputa la falsificación de documentos.
“El estado actual de los procesos acumulados pone en evidencia una sustancial variación en la naturaleza y gravedad de los episodios en examen y de su proyección en aquellos y en la estimación de los reaseguros tendientes a mantener a Aníbal Lotocki sujeto al proceso”, expresaron los camaristas Hernán López, Ignacio Rodríguez Varela y Julio Luciani.
En ese contexto, sostuvieron que la voluntad de entorpecer la investigación era evidente “por los indicios que proporcionaba ya la falsificación de la historia clínica de Cristian Zárate”. Y que consta en el expediente “el incumplimiento por Lotocki, en tres oportunidades, de la obligación de informar circunstancias que pudieran implicar una ausencia de su domicilio por más de 24 horas”.
En una de esas ocasiones, incluso, Lotocki mudó su domicilio sin autorización judicial para establecerse en la Provincia de Buenos Aires. Por ese motivo, “entendemos que el beneficio otrora concedido (la excarcelación) debe ser revocado", expresaron.
Los jueces también recordaron desde que le fue concedida la excarcelación,m en abril de 2021, "Lotocki fue condenado el siguiente 16 de febrero por el Tribunal Oral número 28 a cuatro años de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio de su profesión por el plazo de cinco años, en orden al delito de lesiones graves (causa 50.949/15)” de distintas modelos, entre ellas la fallecida Silvina Luna".
“Aun cuando el pronunciamiento no se encuentra firme, su alcance permite presumir fundadamente que mediará una acumulación con las que puedan eventualmente resultar de los episodios ventilados en conjunto por el juez a quo, así como pone en evidencia que se cierne sobre el encartado la expectativa de una sanción de cumplimiento efectivo de considerable severidad”, señalaron en otro tramo.
Ahora, el juez Luis Schlegel está en condiciones de enviarlo a juicio oral y público por el delito de homicidio simple, el cual prevé una pena de hasta 25 años de prisión. La noticia se conoce un día después de que el magistrado desestimara la denuncia contra el cirujano por el fallecimiento de Silvina Luna debido a que ya fue condenado por el caso, aunque por un delito menor (lesiones graves) y a que hay ya una investigación judicial en marcha en otro tribunal que es el que lo condenó a Lotocki", cuya sentencia no está firme.
La muerte de Rodolfo Zárate
En junio pasado, el juez Schelgel resolvió cambiar la calificación legal que pesaba contra Lotocki por la muerte de Zárate de "homicidio culposo" a "homicidio simple por dolo eventual", tras el requerimiento del fiscal Pablo Recchini, que lo volvió a indagar con nuevas pruebas que surgieron de las conclusiones de la junta médica.
Según el fallo, los estudios prequirúrgicos, realizados de manera particular, ya que el paciente carecía de obra social o prepaga, revelaron que había padecido coronavirus y sufría de Diabetes Mellitus II.
La intervención quirúrgica se realizó el 15 de abril en la Clínica Cemeco, de la Ciudad de Buenos Aires, y luego de la operación, tras ser trasladado a una habitación, según explicó Lotocki, "el drenaje despedía una gran cantidad de 'líquido' (sic) del cuerpo, y ordenó nuevamente su ingreso al quirófano".
Ante ese cuadro, los médicos decidieron transfundirle sangre y llamar a una ambulancia para su traslado a un centro de mayor complejidad, pero tuvieron que realizarle "maniobras de reanimación" porque el paciente se descompensó, hizo un paro cardíaco y antes de su traslado falleció.
De acuerdo al fallo, se pudo verificar que "la clínica en que se desarrolló la cirugía carecía de director médico responsable y que estaba habilitada únicamente para las catalogadas (operaciones) ambulatorias y no contaba con un contrato vigente con otro centro médico con unidad de terapia intensiva".
En ese entonces existían las restricciones por la pandemia por Covid-19, "cuya consecuencia en el territorio de CABA y sus alrededores, entre otras, era la de una ocupación de entre un 95 al 100% de las camas destinadas para personas que requerían de ese tipo de alojamiento hospitalario".
Por su parte, la Fiscalía requirió la confirmación, pues a su juicio el médico provocó la muerte de Zárate porque no existía urgencia para la operación, "la cual, además, por las múltiples incisiones para extraer tejido -descriptos en el informe de la autopsia- excedía el carácter de ambulatoria y debía enmarcarse en aquellas que requieren internación y mayores recaudos".
"No puede aceptarse que no supiera o no hubiera percibido Lotocki que la situación de Zárate empeoraba y que debía ser trasladado de inmediato o, cuanto menos, gestionar de manera certera mayores recaudos ante una emergencia en ciernes", sostiene la resolución judicial.