Alejandro “Papu” Gómez fue sancionado con dos años de suspensión tras haber dado positivo un control antidoping que se realizó en noviembre de 2022, antes del Mundial de Qatar en el que fue campeón con la Selección, y podría perder su medalla si así lo decide la FIFA.
La sanción fue confirmada este viernes por el Monza de Italia, su actual club, que reveló que la sustancia detectada fue terbutalina, un fármaco con acciones broncodilatadoras que se utiliza para el tratamiento a corto plazo del asma.
La versión del Papu según el medio español Relevo, a través del cual se conoció la noticia, indica que en los días previos al control había pasado una mala noche e ingerido la medicación -que era para uno de sus hijos- prohibida en el Código Mundial de Antidopaje, sin consulta previa a los médicos del Sevilla, su club por entonces y donde se realizó el control sorpresa durante una jornada de entrenamiento.
Tanto Gómez como el Sevilla tuvieron conocimiento del positivo desde hace meses, lo que se reflejó en la dificultosa búsqueda de un nuevo equipo al jugador ya que ningún club quería asumir riesgos ante el posible castigo que estaba por decidirse. Esta situación provocó que el Papu esté varios meses sin jugar y finalmente acordase la rescisión del contrato en el último día del mercado de pases, el 1º de septiembre.
En principio, el exArsenal y San Lorenzo quería esperar hasta enero para incorporarse a algún club, una vez que supiera si había o no sanción, sin embargo, terminó sumándose al Monza, con el que apenas jugó dos partidos.
El último tiempo para el Papu no fue nada sencillo ya que a este presente se le suma su salida de la Selección Argentina, envuelta de misterio y múltiples versiones. Sin embargo, ahora todo parece cerrar con este control sorpresa que, en su momento, se ocultó porque fue a escasos días del comienzo del Mundial y terminó trascendiendo en el plantel albiceleste mientras se jugaba la Copa.
Así las cosas, Gómez se expone a la pérdida de la medalla de campeón de Qatar 2022 y también podría resignar el título de campeón de la Liga de Europa conseguido con Sevilla en ese lapso, decisiones que dependen de FIFA y UEFA.
En Qatar, el volante ofensivo de 35 años fue titular en el debut con Arabia Saudita (reemplazado a los 59 minutos) y el choque de octavos ante Australia (salió a los 50), mientras que vio el resto de los encuentros desde el banco. Luego, en marzo, no fue convocado a los partidos en los que se festejó el campeonato obtenido -ante Panamá y Curazao- ya que estaba lesionado, pero tampoco viajó al país para participar de los eventos, lo que levantó muchas sospechas sobre su relación con el plantel.
No obstante y de acuerdo con la normativa antidopaje, el caso no afecta la validez de la tercera estrella conseguida por el seleccionado argentino en Qatar ya que la infracción no fue durante el evento ni tampoco involucró a más de un jugador.
En su artículo 11, el código aclara que "si se determina que más de dos miembros de un equipo en un deporte de equipo han cometido una infracción de las normas antidopaje a lo largo de la duración del evento, la entidad responsable de dicho evento impondrá al equipo las debidas sanciones (como pérdida de puntos, anulación de la competición u otras Sanciones), que se unirán a otras sanciones aplicables a título individual a los deportistas infractores".