Rampas que desembocan en escaleras, cajeros automáticos tapados por columnas, estaciones de subte sin ascensor, baldosas rotas, andamios mal colocados. La Ciudad de Buenos Aires muestra a las claras una falta rotunda de accesibilidad. Así lo explicó por AM750 Dany Arzúa, conductor del programa Periodisca, que padece una cuadriparesia espástica que lo mantiene en silla de ruedas.
El comunicador, que tiene una parálisis cerebral que afectó sus dos piernas y sus dos brazos, recorrió en las últimas semanas el centro porteño junto al candidato a jefe de Gobierno, Leandro Santoro, para exponer las complicaciones con las que se enfrentan, día a día, las personas con discapacidad en una ciudad que se vende como accesible.
Entrevistado por Víctor Hugo Morales, Arzúa expresó que “el punto neurálgico de la Ciudad mostró la falta de accesibilidad que tiene el corazón de Buenos Aires”. Y añadió con humor: “Entre esas cosas, por ejemplo, las estaciones de subte. Me encontré con algo graciosísimo. A mí me causa gracia, pero es penoso. Que es, por ejemplo, una rampa conduce a una escalera”.
“Parece un chiste, pero es real. Eso está en la estación de subtes de la Línea E, en la Línea C. En cualquiera vas a encontrar en la mayoría de los casos rampas que conducen a escaleras”, sostuvo en la radio. A la par, en el un video posteado en redes sociales, contó cómo tiene que elegir dónde bajarse del subte no según su destino, sino según donde funcionen y haya ascensores.
“Cuando se quiere realizar algo accesible, tiene que haber una cadena de accesibilidad. Si esa cadena se corta, lo que hayas hecho anteriormente no va a servir. O va a servir de poco”, explicó Arzúa, quien se lamentó por los trabajos mal hechos en la Ciudad de Buenos Aires, gobernada hace 16 años por el mismo partido político.
“En el video que hicimos con Leandro se observa por ejemplo al ir a un cajero del Banco Ciudad. Fuimos a un cajero que está sobre 9 de Julio. El banco es accesible, no tiene ningún desnivel. Pero cuando vas al cajero, tiene una columna en el medio, entonces para acomodar la silla me tengo que poner de costado”, describió.
Por eso, finalizó: “El tema de las veredas es muy complejo. En Palermo, por ejemplo, tenés baldosas rotas, rampas mal hechas, porque tienen desniveles. Una rampa tiene que ayudar a que no haya desnivel. Y si ya lo tiene, es como agarrar un pozo o subir el cordón de vereda. Para qué sirve si igual es dificultoso. Tenés que ir sorteando la dificultad de las veredas”.
