La elección de este domingo definirá la composición del Congreso Nacional que tendrá el futuro gobierno, independientemente de si haya o no ballotage presidencial el 19 de noviembre. El voto ciudadano en los 24 distritos electorales del país sellarán la suerte de quienes ocuparán las 130 bancas de la Cámara de Diputados que renueva la mitad de sus integrantes; mientras que en ocho provincias –-Buenos Aires, Formosa, Jujuy, La Rioja, Misiones, San Juan, San Luis y Santa Cruz— también se elegirán las 24 bancas que están en juego en el Senado, que modifica un tercio de sus miembros. De acuerdo a las proyecciones ninguna de las fuerzas políticas que disputan por llegar a la Casa Rosada tendrá mayoría ni quórum propio en ambas Cámaras del Parlamento tras el recambio legislativo del próximo 10 de diciembre.
De repetirse el resultado de las PASO del 13 de agosto pasado, Unión por la Patria sería la primera minoría en el Senado; Juntos por el Cambio la bancada más numerosa en la Cámara baja; mientras que La Libertad Avanza aumentaría la cantidad de diputados y tendría senadores propios, pero igual quedaría por debajo de las actuales dos principales coaliciones políticas-legislativas. Aunque ninguna de ellas arriesga pronósticos, cada una tiene aspiraciones de sostener o revertir resultados en algunos de los distritos –especialmente los más numerosos-- para aumentar el número de sus legisladores. Una alquimia de números en las que depositan sus propias proyecciones pero que terminará por definir el voto este domingo.
Diputados
El recambio en la Cámara baja está marcado por la elección presidencial de 2019 que consagró la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner, cuyos diputados electos en esos comicios culminan también su mandato de cuatro años. También por la polarización que marcó esa elección entre las dos coaliciones políticas que disputaron la presidencia, donde ambas obtuvieron el grueso de los legisladores aunque ninguna de las dos con mayoría ni quórum propio en Diputados: el Frente de Todos (ahora Unión por la Patria) conformó un bloque con 118 bancas y Juntos por el Cambio 117. Ambas concentraron 235 diputados de los 257 que integran la Cámara. Las 22 bancas restantes se reparten entre alianzas menores y partidos provinciales.
Pero quien más arriesga en la elección de este domingo es el FdT-UxP: 68 diputados electos en 2019 terminan su mandato y solo conservará otros 50 con mandato hasta 2025. Mientras que en JpC pone en juego 55 diputados propios y otros 62 continuarán en sus bancas por dos años más. Los restantes 7 escaños que están en disputa corresponden a expresiones provinciales, entre ellos 3 (2 de Identidad Bonaerense y 1 Córdoba Federal) alineados con el candidato presidencial cordobés Juan Schiaretti de Hacemos por Nuestro País (HpNP). Mientras que las otras dos fuerzas que compiten en la elección presidencial no ponen en juego ninguno: el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT) conservará los 4 que tiene, y La Libertad Avanza (LLA) los 3 propios, todos ellos elegidos en los comicios legislativos de 2021.
En caso de repetirse los resultados de las primarias de agosto, la configuración de las bancadas en Diputados cambiaría sustancialmente aunque ninguna de las fuerzas que compiten por la presidencia obtendría mayoría propia ni alcanzaría el número mágico de 129 diputados para el quórum. JpC sería la primera minoría con 107 bancas, 9 menos que las actuales. En tanto, el FdT-UxP sería la segunda fuerza con 94 bancas y perdería 24. Mientras que LLA sumaría 37 escaños propios pero relegado a un tercer lejano lugar en la Cámara baja. Mientras que el FIT y HpNP no sumarían bancas.
El Senado
La Cámara alta renueva 24 bancas de las 72 que conforman el cuerpo legislativo, que se elegirán en ocho provincias: Buenos Aires, Misiones, Formosa, Jujuy, La Rioja, San Juan, San Luis y Santa Cruz. En cada una de ellas estarán en juego tres escaños de senadores que se repartirán entre las dos fuerzas más votadas para esa categoría: el que salga primero se adjudicará 2 senadores, y el segundo el restante.
Las y los senadores que culminan su mandato de seis años fueron electos en otro momento político: las legislativas del 2017 cuando la alianza Cambiemos del expresidente Mauricio Macri, se impuso en 13 de los 24 distritos electorales, incluyendo la provincia de Buenos Aires.
Por eso, JxC es el interbloque que más arriesga en la elección de hoy: 11 bancas de las 33 actuales y de las que conservará 22 propias. El FdT-UxP pone en juego 9 de sus 31 y también mantendrá 22 bancas. En tanto Unidad Federal (UF), que se integró con 4 senadores que abandonaron el FdT y se aliaron con la senadora cordobesa que responde a Schiaretti, deberá renovar 2: una por Jujuy y otra por San Luis, que corresponden a quienes pese a mantenerse en el nuevo bloque se plegaron a la candidatura de Sergio Massa. Las dos bancas restantes que deben renovarse corresponden a partidos provinciales: el riojano Hay Futuro Argentina y el misionero Frente Renovador de la Concordia, que funcionaron como aliados del FdT.
También de acuerdo al resultado de las primarias de agosto, el FdT-UxP sería la primera minoría en la Cámara alta con 31 bancas propias, las mismas que ahora. De las 9 que pone en juego, mantendría 8: perdería la representación por San Luis pero ganaría las 2 bancas de Buenos Aires y le arrebataría una que ahora pertenece a JxC.
JxC sería la segunda fuerza con 27 senadores propios, 6 menos que los actuales. En tanto LLA irrumpiría por primera vez en el Senado con 8 bancas propias, por el arrastre que tuvieron sus boletas a senadores nacionales en tres provincias donde obtuvo el primer lugar en las PASO: Jujuy, La Rioja y San Luis, y desplazó del segundo lugar a JpC en Formosa y San Juan. La Cámara se completaría con 3 bancas de UF, que perdería las dos que debe renovar, y otras 3 bancas de partidos provinciales que no están en juego en esta elección.
Por lo que ninguna fuerza de las que disputan la elección presidencial alcanzaría las 37 bancas necesarias para el quórum propio.