Las muestras tendrán particular extensión durante esta nueva entrega de Comicópolis. El sector de exposiciones fue ganando lugar con el correr de las semanas. En la disposición final resultaron ser cinco: Maitena esencial, Las máquinas de Quino, Star Wars 40 años, Libertad de Dibujo - revista Barcelona, y Continum 4. La primera reúne material de la madrina de la convención. Según anticipó Maitena a este diario, los visitantes podrán encontrar parte del material que se reúnen en sus dos últimos libros recopilatorios: Lo mejor de Maitena y Lo peor de Maitena. El primero abarca sus años de mayor reconocimiento público y el segundo sus años de formación, los que ella más aprecia. La selección, contó, fue hecha pensando en que los adultos puedan visitarla con sus hijos.

Las máquinas de Quino, en tanto, busca llevar a la realidad maquetas y dispositivos inspirados en las decenas de máquinas inverosímiles que el gran humorista gráfico argentino creó a lo largo de décadas de trabajo con el plumín. No será la primera exposición dedicada a Quino en Comicópolis. Además de apadrinar la primera edición del festival, también se homenajeó entonces la figura de Mafalda y su importancia en la historia del humor gráfico nacional.

Star Wars 40 años es bastante autoexplicativa desde su título, pero en rigor reúne los trabajos de tres de los dibujantes argentinos que han estado vinculados a la saga desde distintos aspectos gráficos: Ariel Olivetti, Claudio Aboy y Omar Francia. Otros, como Tomás Giorello, no serán de la partida. Continum 4 refiere obviamente al universo de El Eternauta, la creación de Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López, en la que un grupo de ciudadanos comunes y corrientes termina convirtiéndose en una desesperada resistencia contra un invasor alienígena. Al respecto, desde la organización prometen una “megamuestra” en la que “la ficción cobra vida” y “el mundo de la historieta se apodera de nuestra realidad”.

Finalmente, Libertad de dibujo se planta en defensa de la revista Barcelona, demandada judicialmente por Cecilia Pando, la mediática entusiasta de la última dictadura militar y represiones afines. Pando ganó el juicio y puso en peligro la ya frágil situación de la publicación. Comicópolis, entonces, albergará la muestra que la revista realizó en abril del año pasado como respuesta a los intentos de censura, como una forma de expresar su apoyo.