La actividad de la construcción registró en julio una mejora de 20,3 por ciento respecto de igual mes del año pasado, cuando el sector se encontraba en su peor momento en más de una década. En julio de 2016 había caído 23,1 por ciento, el segundo peor desplome después de abril de ese mismo año (24,1 por ciento), según cifras del Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) que difundió ayer el Indec. En el acumulado de los primeros siete meses de 2017 el sector evidencia un aumento de 8,9 por ciento respecto de igual período del año pasado. En todo 2016 la construcción había bajado 12,7 por ciento. El dato de empleo, que se publica con un mes de rezago, evidencia para junio una mejora de 9,9 por ciento interanual, pero todavía se encuentra casi 5 por ciento por debajo de igual mes de 2015.
El foco en la obra pública se refleja en los insumos que mejor desempeño tuvieron en el período. Según el Indec, el consumo aparente de insumos para la construcción en julio estuvo liderado por asfalto, con una suba interanual de 95,1 por ciento, seguido por hierro redondo para hormigón (45,5 por ciento), artículos sanitarios de cerámica (30,2), cemento (19,8), resto de los insumos, vidrio y tubos de acero sin costura (18,8), ladrillos huecos (13,5), placas de yeso (13,1), pinturas para la construcción (11,0), y pisos y revestimientos (1,7). En el acumulado de los siete primeros meses también se mantiene el liderazgo de consumo de asfalto (89,7 por ciento), hierro redondo para hormigón (24,9) y cemento (8,4). En el acumulado a julio la única baja fue para artículos sanitarios de cerámica, con 1,9 por ciento.
El empleo registrado del sector, según la información de aportes y contribuciones al sistema previsional, mejoró 1,4 por ciento en junio (435.585) contra mayo previo (429.764). Esta cifra además representó una mejora de 9,9 por ciento respecto de los 396.286 puestos que exhibía la actividad en el mismo mes del año pasado. No obstante, si se compara con los 458.433 puestos registrados en junio de 2015, antes de la asunción del gobierno y de la fuerte retracción de la actividad de la construcción, se exhibe una baja de 4,98 por ciento.