La AFIP presentó una denuncia penal para determinar el origen de los datos sobre el blanqueo de 132,5 millones de dólares realizado por familiares, socios, amigos y allegados al presidente Mauricio Macri que fueron revelados el último domingo por PáginaI12. La medida de la autoridad tributaria, que considera la divulgación de la información como una violación al secreto fiscal, no esperó a conocer los resultados de la investigación judicial que quedó a cargo del juez Rodolfo Canicoba Corral y apartó de su cargo al subdirector de Sistemas y Telecomunicaciones, Jorge Enrique Linskens. El desplazamiento del funcionario que ofreció su renuncia fue oficializado en el Boletín Oficial el miércoles a través de la disposición 238-E/2017. La decisión lleva la firma del titular del organismo recaudador, Alberto Abad, quien lo reemplazó por Néstor Sosa, hasta ayer subdirector de Auditoría Interna. Ningún representante del Poder Ejecutivo cuestionó la información publicada en este diario, que incluye al hermano del presidente, Gianfranco Macri; el mejor amigo del mandatario, Nicolás Caputo; el empresario Marcelo Mindlin, que el mes pasado anunció la compra de la constructora Iecsa, hasta entonces en manos del primo presidencial, Angelo Calcaterra; un primo del jefe de Gabinete, Alejandro Jaime Peña Braun, y un cuñado del secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Pablo Clusellas Zorraquín.
El monto regularizado por Gianfranco Macri asciende a 35,5 millones de dólares que no habían sido declarados al fisco. El hermano presidencial es el Macri más activo en la apertura de sociedades offshore en Panamá. Inmobiliaria de Negocios, Le Mare A-18, Joy B-28, Serenity C-44 y Yoo H-45 son las denominaciones de fantasía de las cinco firmas panameñas presididas por el empresario. A ese grupo de compañías se agrega Kagemusha, donde compartió cargos directivos con Mauricio y su padre Franco. Siempre vinculado a los diversificados emprendimientos del Grupo Socma, Gianfranco fue hasta finales de marzo de 2016 accionista y titular de la aerolínea familiar Macair, que se vendió a la colombiana Avianca.
Los 2319 millones de pesos que blanqueron familiares y amigos del Presidente y sus más cercanos funcionarios, o 132,5 millones de dólares, pueden parecer una suma exigua, comparada con los 116.000 millones de dólares que blanquearon 254.700 CUITs distintos, de los cuales 96 por ciento corresponden a personas físicas y 4 por ciento a personas jurídicas. Sin embargo, la suma blanqueada por Gianfranco, que equivale a 622 millones de pesos, quintuplica los bienes declarados por el mandatario argentino, que ascienden hasta los 126,6 millones de pesos, contabilizando lo incluido en el supuesto fideicomiso ciego.
La participación de familiares directos de los funcionarios había sido bloqueada cuando se aprobó la exteriorización en el Congreso. Introducido a pedido de la oposición y miembros prominentes de la propia coalición de gobierno, el artículo 83 de la ley 27.260 excluyó a los cónyuges, padres e hijos menores emancipados de los sujetos alcanzados que hubieran desempeñado cargos públicos desde 2010. Sin embargo, en diciembre del año pasado la Casa Rosada abrió la ventana para que esos individuos participen del blanqueo. El artículo 6 del decreto 1206 señaló que “los sujetos comprendidos en el Artículo 83 de la Ley N° 27.260 podrán efectuar la declaración voluntaria y excepcional”.
El listado difundido por Horacio Verbitsky el domingo pasado en este diario incluye además a Nicolás Caputo, “hermano de la vida” del presidente Macri y ex socio en una de las empresas del holding familiar. La fortuna blanqueada por Caputo asciende hasta los 26,5 millones de dólares, alrededor de 465 millones de pesos. El empresario constructor que abultó su fortuna como contratista de obras públicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue designado en abril como cónsul honorario en Singapur, una de las guaridas fiscales más importantes del mundo utilizadas para canalizar maniobras de evasión, lavado, ocultamiento, y fuga de capitales.
Quien blanqueó la suma más significativa fue Marcelo Mindlin. Dueño de la energéticas Edenor y Pampa Energía, titular de activos de Petrobras en la Argentina y, según anunció el mes pasado, propietario de la constructora de la familia Macri regularizó 44 millones de dólares, o 770 millones de pesos. En tanto, Alejandro Jaime Peña Braun, primo del jefe de Gabinete, Marcos Peña Braun, sinceró 6,2 millones de dólares que equivalen a 109 millones de pesos. Uno de los cuñados del secretario Legal y Técnico, Pablo Clusellas, blanqueó 20,1 millones de pesos. Casado con Susana, una de las hermanas del funcionario y amigo de la infancia del presidente, Manuel Lucio Torino Ortiz regularizó fondos por una suma de 353 millones de pesos.