Si bien no hubo datos que aportaran certeza sobre el destino del preso Mauricio Laferrara, ante la sospecha de fuga, la policía santafesina se sumó a la investigación sobre la desaparición del “Caníbal” en la cárcel de Devoto. Autoridades federales decidieron recurrir al mismo jefe que atrapó al sicario en 2019, meses después del arresto del narcotraficante Esteban Alvarado. Desde ayer lo buscan personal de la División Búsqueda de Prófugos de la Policia Federal Argentina y una brigada a cargo del comisario Maximiliano Bertolotti quien ya lo había apresado en 2021 en una vivienda de 9 de Julio al 3300.  También intervienen la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) y a una fiscalía de la Ciudad de Buenos Aires.

El joven de 27 años ingresó al complejo penitenciario porteño en el segundo semestre de 2021. Hasta entonces había estado detenido en territorio santafesino, pero lo trasladaron como parte de las medidas adoptadas tras el tiroteo y la fuga de ocho presos de la cárcel de Piñero.

Laferrara tenía visitas agendadas el viernes de la semana pasada en Devoto, pero nunca se presentó. Cuando los guardiacárceles fueron a buscarlo, no lo encontraron. Era el único que faltaba cuando hicieron el recuento en el pabellón 11 y no lograron hallarlo tras la recorrida por el resto de las instalaciones.

Una de las primeras hipótesis sobre el caso señalaba que a “Mauri” lo habían asesinado. De acuerdo a la teoría su cuerpo fue descuartizado y arrojado a la basura del penal. Ante la falta de evidencia de un homicidio, el juez federal Eduardo Rodrigues da Cruz ordenó la captura del recluso.

A partir del pedido del magistrado, las autoridades porteñas se comunicaron con Maximiliano Bertolotti para profundizar la búsqueda. Desde el año pasado, el subdirector de policía conduce la Unidad Especial de Investigación de Crimen Organizado del Ministerio de Seguridad de Santa Fe.

En 2019, el exjefe de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) coordinó el operativo que terminó con la captura de Laferrara en barrio Echesortu. Meses antes coordinó un plan similar con sus pares cordobeses y atrapó a Alvarado, el jefe del sicario imputado por múltiples asesinatos en Rosario.

Mauricio Laferrara estaba en el penal de Devoto "porque quería estudiar, y allí era posible. Pero además estaba lejos de su grupo y eso podía evitar que siga por el mismo camino " le confiesa a este cronista Enrique Fernando Sirio, su abogado en el fuero penal federal donde "Caníbal" tenía causas por drogas.  El letrado reconoce que fue él quien solicitó ese traslado para evitar que compartiera encierro con quien fuera su jefe Esteban Lindor Alvarado. 

Lo cierto es que varios pesquisas describen a Laferrara como un muchacho circunspecto, callado, que mantenía su cabeza gacha ante el diálogo, y que no tenía una personalidad pendenciera, de andar buscando problemas con sus pares, dentro de la cárcel. "Lo cierto es que en Devoto no tenía grupo, andaba solo. Y eso pudo haberle jugado en contra", dicen quienes están perfilándolo, para saber cuál pudo haber sido su destino : si la calle o la muerte.

"Se está trabajando sobre la hipótesis de fuga", dijo uno de los investigadores, quien confirmó que las autoridades del SPF denunciaron la "desaparición" del preso el viernes pasado tras un recuento de presos. La última requisa que realizó el SPF en la que se detectó la presencia del "Caníbal" Laferrara dentro del penal fue el martes último, según consignaron las fuentes de la investigación, que agregaron que la siguiente fue el viernes, cuando ya no lo detectaron.

Los investigadores analizaban la totalidad de las cámaras de seguridad tanto del interior de la cárcel de Devoto como de los alrededores, aunque por el momento no se registraron movimientos sospechosos del "Caníbal" Laferrara. Por eso, una hipótesis que se maneja es que el jefe de los gatilleros del capo narco Alvarado se haya escapado escondido entre la basura que sale del penal.

Por este motivo, los investigadores pidieron que se haga un análisis de los movimientos de la empresa que se dedica a retirar la basura de la cárcel, hacia donde la lleva y las identidades de los choferes de los camiones que ingresaron al lugar, dijeron las fuentes. Las pesquisas quieren establecer si existió algún tipo de ayuda del exterior del penal o, bien, dentro del mismo, que pudieran haberle facilitado la fuga.