Al menos 38 vuelos de aerolíneas low cost desde y hacia el aeropuerto metropolitano Jorge Newbery debieron ser cancelados por una medida de fuerza gremial tomada por los maleteros. Las demoras comenzaron a la mañana y continuaron hasta la tarde, cuando los trabajadores decidieron acatar la conciliación obligatoria dictada más temprano por el Ministerio de Trabajo nacional. Unos 10.000 pasajeros resultaron damnificados.
La medida afectó a las empresas JetSmart y FlyBondi y fue llevada adelante por agremiados de la Asociación del Personal Aeronáutico que trabajan en la firma Intercargo.
Las low cost explicaron que son clientes de Intercargo, al no contar con "personal propio que tenga que ver con las tareas que realiza el proveedor o que puedan estar dentro del encuadre sindical de APA".
"El conflicto tiene su origen en el incumplimiento por parte de la empresa de servicios de handling, de una conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, que dictaba la reincorporación de una trabajadora", dijeron, por su parte, voceros gremiales.
Intercargo es la empresa estatal que brinda los servicios de traslado de pasajeros y sus equipajes entre la zona de embarque y los aviones, entre otras actividades.
"Lamentamos las molestias ocasionadas a nuestros pasajeros por medidas de fuerza que fueron adoptadas de manera irracional y sin la más mínima consideración del impacto negativo que generan", sostuvo FlyBondi en un comunicado.
JetSmart, por su parte, señaló que "la interrupción del servicio de Intercargo impidió a la empresa y a sus colaboradores el ejercicio de su derecho al trabajo, a la vez que mantuvo de rehén a los pasajeros que eligieron viajar a más de 20 destinos en el país y la región".