Una tragedia colectiva siempre entrega alguna enseñanza, deja un legado, una historia por reconstruir, además de sus dolorosas consecuencias personales y un laberinto jurídico para esclarecerla. Resulta imposible sustraerse de lo que pasó en el vuelo charter que se estrelló en Colombia con el plantel brasileño del Chapecoense. En ese viaje, además, iban veinte periodistas deportivos, además del personal aeronáutico, los jugadores y el cuerpo técnico.
La zozobra emocional que transmite un desastre como el del humilde club de Chapecó, en el oeste del estado de Santa Catarina, cruza todas las identidades futbolísticas. La pérdida se desparrama por el universo del fútbol, con gestos que ya se replicaron en minutos de silencio, palabras de congoja, voluntades solidarias, respaldos económicos prometidos a futuro y la certeza de que ya nada será igual en esa ciudad que el Chapecoense puso en el mapa futbolero para siempre.
No jugará la primera final de su historia, pero sí ya la ganó en el corazón de miles de hinchas que desde ayer intentan dedicársela. En ese marco de tristeza que se expande, los jugadores que iban a ser sus rivales en Medellín hicieron una demostración de grandeza que los unirá para siempre a sus colegas fallecidos en una montaña perdida de Colombia. “Hay que esperar la decisión de la Conmebol, pero nosotros queremos que Chapecoense sea el campeón. Es nuestra iniciativa”, declaró Gilberto García, defensor y vocero de un sentimiento colectivo que expresó Atlético Nacional.
En un comunicado donde el club ratificó la voluntad de sus jugadores, le formuló ese pedido a la desprestigiada Conmebol, que ahora deberá revalidarlo. “Luego de estar muy preocupados por la parte humana pensamos en el aspecto competitivo y queremos publicar este comunicado en donde Atlético Nacional invita a Conmebol a que el título de la Copa Sudamericana le sea entregado a la Associacao Chapecoense de Futebol como laurel honorífico a su gran pérdida y en homenaje póstumo a las víctimas del fatal accidente que enluta nuestro deporte”.
Un gesto que invita a creer una vez más en el género humano entre tantas miserias (en este caso las deportivas). ¡Chapeau! para los colombianos del Atlético Nacional.
Opinión
Chapeau para Nacional
Este artículo fue publicado originalmente el día 30 de noviembre de 2016