Desde el cuarto lugar al primero. Ese fue el ascenso de Nelson Sombra, intendente electo de Azul, entre las PASO y las elecciones generales del pasado domingo. Se alzó con más de 13.800 votos, en un claro escenario de tercios a nivel local, y posibilitó que el peronismo vuelva a gobernar la localidad del centro de la provincia tras ocho años. De cara al balotaje, tendrá como estrategia consolidar el pronunciamiento de instituciones y organizaciones locales sobre una premisa que, a su criterio, es la que se pondrá en juego el 19 de noviembre: “A 40 años de Democracia hay que tomar partido, no se puede ser tibio”.
En las últimas horas, Sombra tuvo su primera reunión como intendente electo con el gobernador Axel Kicillof y el candidato a presidente Sergio Massa, en La Plata. “Fue un encuentro positivo y motivador”, cuenta. Uno de los repasos que se hicieron durante la reunión vino de parte de Kicillof, quien relató que sus primeras reuniones en la Gobernación eran con algo más de 40 intendentes, luego más de 60, y que hoy son más de 80.
“Nos dijeron que la etapa municipal y provincial estaba superada y ahora viene la final de las finales”, resalta. Señala que en la reunión se pidió “que no se afloje” y que cada uno de los presentes desarolle sus estrategias de persuasión a nivel local. “En nuestro caso, demostrar que esta no es una discusión entre peronistas y radicales, si no que se trata de que están en juego dos mundos diferentes”, asienta su postura.
Si bien habrá una adecuación a la estrategia general de la campaña que transmita Massa, Sombra dice que en Azul iran en búsqueda del pronunciamiento de distintos actores políticos y representativos de la sociedad local, “sin que tengan que levantar una bandera exacerbada, elijan la propuesta de UxP”. Sobre este objetivo, afirma que “no es lo mismo que eso lo diga un candidato a que lo planteen empresarios, la Sociedad Rural, los profesionales”.
“Es necesario expresarse, no se puede ser tibio y hacerse el distraído, por lo que hay que dejar un mensaje en defensa de la democracia, y quitar la educación pública o la salud pública como propone Javier Milei, es menos democracia”, hace hincapié el intendente electo.
La remontada
Sombra cuenta que tras el cierre de los comicios fue a su casa con Paola, su esposa, antes de salir para el búnker partidario. “A las 19 íbamos escuchando la radio que transmitía el conteo e íbamos cuartos”, recuerda sobre la tarde del domingo electoral. Fue así hasta pasadas las 20, donde empezó, como bien define el dirigente de Unión por la Patria, “una carrera del Turismo Carretera donde tres autos están en los últimos metros y el de atrás empieza a escalar posiciones”.
“Vibrante”, es la palabra que utiliza para definir el momento cuando el conteo lo fue llevando al primer lugar. “Fue como la final de mundo, donde nos poníamos arriba y después nos empataban”, dice hoy más tranquilo que en aquellas horas.
En las PASO, UxP tuvo una interna con dos contendientes. Sombra triunfó con 5.119 votos, y la fuerza peronista en su totalidad, se hizo con 9.386. Juntos por el Cambio se quedó con el primer puesto con más de 18 mil votos, y también puso en cancha tres competidores, entre ellos el actual intendente, Hernán Bertellys.
Pero la ganadora fue Natalia Colomé, la candidata larretista apadrinada por el jefe comunal de Olavarría, Ezequiel Galli. En tercer lugar como espacio, pero con el segundo candidato más votado de la elección, se ubicó La Libertad Avanza, que de la mano de Luis Kletnicki se hizo con casi 7.500 adhesiones.
Así las cosas, el ránking de los más votados a título personal en las primarias tuvo a Colomé con casi 8.200, luego el representante libertario, tercero el propio Bertellys con 5.287, y cuarto Sombra por el peronismo.
El pasado domingo, la ecuación cambió. Sombra trepó a casi 14 mil votos, Colomé finalizó segunda y retuvo solo dos tercios del electorado cambiemita, y Kletinicki se ubicó tercero, a menos de 500 votos la candidata de Horacio Rodríguez Larreta.
De cara a asumir el 10 de diciembre, Sombra cuenta que ya se reunió con Bertellys y la transición viene viento en popa. “Vamos a mostrar todo, no para criticar, sino para que la sociedad sepa desde donde arrancamos”, afirma. Así como le contó a este medio previo a las primarias, sobre diagramar un gobierno de unidad a nivel local es claro: “No tengo las puertas abiertas, tengo un portón”.
Si bien sostiene que son múltiples los factores que explican el resultado de los comicios en Azul, a la luz de lo que sucedió en las últimas horas dentro de JxC con la conferencia de Patria Bullrich apoyando a Milei, y la UCR junto a Larreta velando por la neutralidad frente a la segunda vuelta, Sombra advierte que las discrepancias de la oposición no son actuales e incidieron en la elección.
El intendente electo señala que hay un “condimento especial” en el plano local que también arrastró a la oposición a una pérdida de empatía, particularmente en el caso de Juntos. “Los perfiles que se presentaron a nivel nacional no pudieron calar a nivel local, porque también los candidatos a nivel local tienen otra impronta”, remarca. “Acá se sabe cómo son todos”, apunta.
Para Sombra, hubo una “descoordinación y agresión” a nivel nacional de JxC y de Milei que “asustó” a todos a raíz de que “la propuesta sea eliminar al otro”. Señala que todo este combo distrajo la estrategia de la oposición a nivel local y evito que focalicen su dardo hacia UxP.
Por eso asegura que el acompañamiento recibido en Azul, donde Massa obtuvo 500 votos más que Sombra, y Kicillof 300 más, es producto de que se rompieron barreras de índole ideológica. “Acá ganó la política como herramienta de transformación, donde se puso el valor en la trayectoria y la posibilidad de tener un vínculo aceitado con la Provincia y la Nación y Azul esté alineado”, explica el intendente electo.
“La sociedad se volcó a un perfil como el de Massa, que con medidas empieza a garantizar un futuro prometedor”, destaca Sombra, que tiene en claro, tal cual lo manifestó durante la campaña, que las diferencias entre los proyectos de los distintos espacios deben “robustecer” las propuestas e iniciativas y no deben ser un agente que “perjudique” a los azuleños. “Quiero armar la mejor elección posible”, sostiene Sombra de cara a noviembre, pero deja algo en claro: “Hay que respetar lo que eligió la voluntad popular”. El futuro, dice, “es con unidad o no lo es”, remarca.
Sobre la nueva composición del Concejo Deliberante, donde UxP tendrá sólo seis bancas de las 18 que integran el recinto, Sombra tiene en claro de que se necesitará “mucho diálogo” en esta etapa de Azul. En las recientes elecciones, se renovaron nueve ediles, y el reparto fue equitativo para las tres fuerzas mayoritarias. Por el lado de Bertellys, perdió a sus representantes, y “habrá que ver si el vecinalismo se junta con el radicalismo o no”.
Con un cuadro de dispersión en el poder legislativo local, anuncia que una de las primeras medidas que enviará al Concejo es la reforma tributaria, porque “no hay demanda social que no amerite respuesta económica, que, a su vez, no le corresponda una discusión política”.