El Senado de Salta aprobó ayer en sesión especial el pliego de la abogada María Edit Nallim, propuesta por el gobernador Gustavo Sáenz para que ocupe un cargo en la Corte de Justicia de la Nación.
Por la mañana la postulante fue entrevistada por integrantes de Comisión de Justicia, Acuerdos y Designaciones, que luego emitió un dictamen a favor de su designación, que fue luego refrendada por el pleno del Senado y ocupará el cargo dejado vacante por la ahora ex jueza de Corte Sandra Bonari, quien se acogió a la jubilación.
En la misma sesión especial se aprobó también la designación de la abogada Nadia Lorena Cruz para ocupar el cargo de jueza de Primera Instancia de Menores de Segunda Nominación del Distrito Judicial del Centro, cargo que estaba vacante. Cruz también fue entrevistada por la mañana.
María Nallim es abogada y docente universitaria. Se desempeñó en el ámbito de la actividad privada como abogada y consultora, tanto en el fuero provincial como en el federal. Es también una referente local en la rama del derecho societario, y de concursos y quiebras y asesora legal de empresas del medio y desde hace un año y medio era asesora en la Auditoría General de la Provincia.
Es docente universitaria desde 1993 en las cátedras de Deontología Jurídica y Derecho Societario en la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Católica de Salta. Asimismo, es profesora en Ciencias Jurídicas por la Universidad Nacional de Salta. También ejerció como docente de Instrucción Cívica en el nivel secundario.
Ayer dijo que la postulación para integrar la Corte de Justicia de Salta representa un desafío. “Me hace salir de una zona de confort y me desafía a poder aportar al servicio de justicia”, aseguró.
Tras la entrevista con los senadores de la Comisión de Justicia habló del ejercicio liberal de la abogacía que vino haciendo hasta ahora y de cómo ve a la administración de justicia desde ese lugar. “Uno más que una visión tiene una percepción trabajando desde afuera por este servicio de justicia. Todos los abogados de alguna manera trabajamos y colaboramos con el servicio de justicia. Yo me he desempeñado siempre en forma particular, así que el desafío y la proyección que hago es poder sumar y colaborar desde esa visión de quien ayuda y sirve desde afuera", afirmó.
Aseguró que "la abogacía es una profesión de servicio, no importa de qué lugar del mostrador uno esté". "Así que creo que si puedo transmitir y sumar desde esta visión y desde las urgencias que tiene a veces el afuera, puedo colaborar y estar a la altura de lo que exige un puesto al que le tengo mucho respeto, respeto muchísimo la función judicial", agregó. Añadió que si bien nunca hasta ahora trabajó en el Poder Judicial cuenta con la experiencia como abogada litigante y consideró que "es una visión que puede enriquecer y sumar para que las urgencias de afuera puedan tener soluciones y que lleguemos al objetivo final al dar a cada uno lo suyo del modo más eficiente posible".