El boliche República de Cromañón, escenario de la tragedia que dejó 194 fallecidos en 2004, fue declarado Monumento Histórico Nacional. La medida fue oficializada mediante el Decreto 571/2023, publicado este miércoles 1º de noviembre en el Boletín Oficial. Además del edificio donde funcionaba la discoteca, el hotel lindante también fue incluido en la decisión del Gobierno nacional.
La declaración realizada por el Ministerio de Cultura implica que "el Estado puede hacerse del espacio" y "sacarle definitivamente la posesión al dueño del local" con el objetivo de preservar el inmueble, explicó a Página|12 Martín Genauer, sobreviviente de la tragedia de Cromañón. El siguiente paso, estima Martín, es la "mensura de costos del lugar, porque hay que pagarle" al dueño del inmueble.
Por otro lado, agrupaciones de sobrevivientes y familiares continúan a la espera de la reglamentación de la ley de expropiación del inmueble, que ya fue votada en el Congreso. "Eso ordena como se va a expropiar, como va a ser la comisión administradora y expropiadora, eso depende del Ejecutivo", apuntó Martín.
En el decreto, las autoridades también decidieron resguardar el "Paseo de los pibes de Cromañón" declarándolo Lugar Histórico Nacional. Este predio incluye los murales artísticos alusivos realizados sobre la medianera de la estación del tren Sarmiento y el santuario o memorial, ubicado sobre la calle Bartolomé Mitre, entre Jean Jaures y Ecuador.
Al respecto, el Gobierno consideró que ese espacio contiene una "profunda carga simbólica, donde el carácter inquisitivo y reparador del arte popular se hace patente ante los ojos de quienes lo transitan, erigiéndose como un hito insoslayable para la Memoria de las Víctimas".
En tanto, la Colección Cromañón, un archivo que recopila testimonios, objetos, fotografías, material de prensa escrita y audiovisual en la sede del Archivo Nacional de la Memoria en la exEsma, fue declarado Bien de Interés Histórico Nacional.
Cómo fue el incendio de Cromañón
Todo se inició en la noche del 30 de diciembre de 2004, cuando una bengala sostenida por un asistente al recital de Callejeros en el boliche República de Cromañón fue a parar al techo, que se empezó a prender fuego rápidamente. Las llamas se expandieron con ferocidad y el humo invadió todo el boliche, con un saldo de 194 fallecidos.
La gran mayoría de quienes perdieron la vida o resultaron heridos eran jóvenes. Además, al menos 4.500 sobrevivientes reportaron distintas secuelas físicas y psicológicas en los años posteriores a la tragedia.
"La trágica jornada del 30 de diciembre de 2004 fue producto del accionar de sujetos públicos y privados, quienes, siendo responsables de la seguridad e integridad de terceros que se encontraban ocasionalmente a su cuidado, decidieron omitir las claras señales y reiteradas alertas en lo relativo a las condiciones del local", sentenciaron las autoridades en los considerando del decreto.
La compleja trama de responsabilidades civiles y políticas que se desataron luego del incendio implicaron la realización de cuatro juicios orales para juzgar a un total de 26 personas, de las cuales 21 fueron condenadas. Casi todos ya están en libertad, excepto Eduardo Vázquez, baterista del grupo Callejeros, que sigue preso por el femicidio de su esposa, Wanda Taddei.