Como era previsible, miles de hinchas de Boca iniciaron una multitudinaria y fervorosa movida rumbo a Río de Janeiro para asistir a la finalísima ante Fluminense. Aunque los más adelantados ya están en esa ciudad (y debieron soportar algunos actos de violencia aislada de parte de barras del  equipo brasileño), se estima que entre este jueves y el viernes estarán llegando por vía aérea y terrestre mas de cien mil personas, de las cuales no más 20 o 25 mil podrán ingresar a ver el partido en el estadio Maracaná.

El resto posiblemente se concentrará en el sambódromo de la ciudad donde se pondrán pantallas gigantes para seguir la definición de la Copa Libertadores. También habrá un Fan Fest que compartirán los hinchas de los dos equipos.

Aerolíneas Argentinas programó más de 40 vuelos a Río de Janeiro con motivo de la final del sábado. A las 19 partidas regulares semanales se le sumaron 21 vuelos especiales para los hinchas xeneizes, que saldrán desde Ezeiza y el Aeroparque de la ciudad de Buenos Aires y llegarán entre este jueves y el sábado a la ciudad carioca. La aerolínea de bandera informó que entre la operación regular y los vuelos especiales, habrá movilizado más de 6.000 hinchas boquenses hacia Río de Janeiro. Además, otro tanto lo harán en los vuelos de la empresa a San Pablo e Iguazú.

Tambien partieron más de ochocientos vehículos particulares, 37 micros y varias combis desde distintos puntos de la ciudad en una caravana azul y oro que se irá intensificando a medida que se acerque el día del gran partido. Las filiales y peñas boquenses del Gran Buenos Aires y el interior del país también estuvieron muy activas y fletaron gran cantidad de micros que estarán mas de cuarenta horas en las rutas antes de llegar a Río para acompañar al equipo en procura de su séptima Copa Libertadores.