La jueza de Familia 2 de Orán, Ana María Carriquiry, inició el proceso de un amparo colectivo presentado por dos abogados en representación de 26 personas con distintas discapacidades que piden la cobertura completa de la obra social provincial. 

Es el primer amparo colectivo de estas características que se presenta en Oránsería el primero que también se presenta en la justicia provincial. En cambio, en la justicia federal, según recordó Carriquiry, hubo una presentación colectiva en reclamo de la cobertura del PAMI a afiliados del municipio oranense de Hipólito Yrigoyen.

El reclamo que llevaron Luciana Torres Genes y Diego Marcelo Quintana, representantes legales de amparistas de Orán, tiene por objetivo que el Instituto Provincial de Salud de Salta (IPS) otorgue cobertura total a los tratamientos médicos de rehabilitación y transporte por el tiempo y etapa que requiera cada uno de los casos de personas con discapacidad.

Aunque Genes y Quinta habían presentado una medida cautelar, la jueza ya la rechazó al entender que el objetivo de este planteo se condecía con lo solicitado en el recurso de amparo.

Las personas con discapacidad que vivan en el departamento Orán podrán hacer presentaciones al mail [email protected], con nombre completo, DNI, domicilio, certificado de discapacidad, carné que acredite ser titular o beneficiario de la obra social IPS, aclarando si adhiere al amparo colectivo.

Las presentaciones se podrán hacer desde este lunes a las 9 horas hasta las 20 del martes 7 de noviembre.

La jueza solicitó al Colegio de Abogados y Procuradores de Salta que a través de las comisiones de Derecho Constitucional, Instituto de Personas con Discapacidad e Inclusión de grupos vulnerables, y al Instituto de Derechos Humanos del mismo Colegio que emitan un dictamen sobre el proceso en calidad de amicus curiae (amigos del tribunal). “Es decisión de ellos si se presentan o no”, explicó la magistrada en diálogo con Salta/12.

También dispuso la inspección ocular a un centro de rehabilitación integral que mencionan los y las amparistas, medida que se llevará a cabo el 8 de noviembre. Y habrá también una audiencia presencial el próximo 10 de noviembre. La magistrada calculó que la cuestión estaría resuelta en un mes y medio, o dos como mucho.

En representación de niños y niñas

En el escrito del amparo Genes y Quintana informan que la representación de las 26 personas amparistas incluye solo a una adulta con dispacidad, mientras el resto son madres y padres de niños y niñas con discapacidad.

Los grados de discapacidad son diversos y requieren, por lo tanto, variados tratamientos que se detallan en el amparo.

El problema en este mometno es que la obra social “solo cubre un porcentaje de entre el 60 y el 70 por ciento, siendo que los demás gastos, erogaciones y cualquier otro emolumento que demande la rehabilitación de los menores” son soportados por madres o padres.

En el amparo se menciona también que existe un Centro de Rehabilitación Integral que permite la atención en la ciudad de Orán. Pero la cobertura es parcial. Para buscar profesionales y evitar el pago es necesario que las personas con discapacidad se trasladen por lo menos hasta 300 kilómetros (la distancia entre Orán y Salta Capital), para buscar especialistas que traten sus dolencias. Ello implica también que las personas que les acompañan deban acomodar sus horarios laborales y familiares para hacer los viajes necesarios.

E implica también que deban afrontar costos “que, en definitiva, y en atención a la especial situación económica del país, resultan imposibles sostener en el tiempo”, se asegura en el amparo. En algunos casos esta dificultad provoca que infancias con discapacidad deban suspender o no realizar directamente sus tratamientos médicos, lo cual “provoca empeoramiento o detrimentos en los estados de salud”.

A través del amparo se reclama el pago o reconocimiento integral de rehabilitación desde el inicio del tratamiento de cada niño y niña, a partir de marzo, y que tengan la posibilidad de elegir el instituto de atención interdisciplinaria integral de Orán, intención que “no obedece a un capricho, sino a una necesidad”.