Este domingo 5 se celebrará el primer Encuentro de Autoras Tangueras. La cita es de 15 a 21 en la Fundación Casa del Tango (Guardia Vieja 4049) y la propuesta de la colectiva de investigadoras, poetas y bailarinas es que el público se acerque a un conversatorio abierto para debatir la escena del tango actual, a compartir una clase con perspectiva de género y disfrutar la exposición Nuevas narrativas tangueras, de la artista plástica y bailarina Romina Pernigotte (que tiene, además, otra muestra similar a partir de la misma serie de trabajos en la Academia Nacional de Tango). Desde luego, tratándose de Autoras Tangueras, estará presente su mesa itinerante, con el catálogo de sus integrantes, pero además lanzarán su flamante proyecto, la Biblioteca / Catálogo Virtual Internacional que convoca no sólo a sus participantes, sino a otras literatas del tango del resto del mundo.
De la colectiva participan, entre otras, pioneras como Carolina Córdoba, Mercedes Liska, Andrea Uchitel Soledad Maidana y Marina Cañardo (actual directora del Museo Nacional de Arte Decorativo). En su acervo conviven libros de poesía, investigaciones históricas, recorridos antropológicos, ensayos sobre danza, trabajos de musicología y más. “Autoras Tangueras tiene la particularidad de ser una agrupación que se va definiendo día a día. A los lugares donde nos invitaban, íbamos con la mesa de libros porque eso era lo visible, pero eso es sólo una de las cosas que pasan dentro de la agrupación”, destaca Pernigotte.
Para muchas del grupo, ya el hecho de encontrarse y trabajar juntas es “un regalo del presente”. Para las que llevan más tiempo transitado, en cambio, es una conquista de la militancia feminista. “Lo que queremos visibilizar es el cruce de distintas disciplinas para no solo armar red, sino resignificar cada campo de investigación en el que nos desarrollamos, por eso la necesidad es esta vernos presencialmente, juntarnos e invitar a todo el mundo, además de a otras autoras tangueras que no están en la agrupación, a que se acerquen a intercambiar”.
“Lo que estamos haciendo es activar en este presente la mirada, la cosmovisión que las mujeres tuvieron y tenemos en el tango y a partir de eso se va configurando una coyuntura de lo que hoy es el tango”, reflexiona la autora. “No sé si estamos buscando darle forma, la forma aparece con este conjunto de diversidad de colores que tiene el tango, de formas de entenderlo, pensarlo”, plantea. “Ahora somos las mujeres las que nos contamos a nosotras mismas, narramos nuestras historias, y eso tiene otro punto de vista, otro lugar asignado hacia nosotras distinto del que quizás nos hayan dado los historiadores que no vivieron en un cuerpo de mujer, el lugar que nosotras creemos que transitamos, como nosotras vemos y sentimos”.