Por las fuertes lluvias y los vientos de hasta 100 kilómetros por hora que afectan a gran parte de la región, al menos seis personas murieron en las últimas horas en el estado brasileño de San Pablo.
En algunos barrios ya llevaban más de 16 horas sin luz mientras que más de treinta municipios, incluida la propia ciudad de San Pablo, informaron la caída de árboles por la tormenta, consignó la agencia de noticias Europa Press.
En Osasco, a las afueras de la ciudad, uno de estos árboles cayó sobre un coche y causó la muerte de una persona que estaba adentro, reportó Defensa Civil del estado.
En el municipio de Santo André cayó un muro que ocasionó el fallecimiento de otra persona, en tanto que una segunda resultó herida y se encuentra hospitalizada en el Centro Hospitalario de Santo André, informa el Cuerpo de Bomberos.
En Limeira, situado en la parte oriental del interior del estado, un trabajador murió también por el derrumbe por el viento de un muro de siete metros de altura en construcción, señaló la Guardia Municipal. Por el temporal, se cortó el suministro eléctrico en varios barrios de Sao Paulo, ciudad que se encuentra en estado de alerta y los Bomberos recibieron más de 1.200 llamadas durante el viernes.
Las lluvias en la zona, además, registraron precipitaciones de granizo y hay carreteras cortadas.
Brasil no es el único país de Sudamérica afectado por temporales y tornados. Al menos dos personas han fallecido, otras 16 sufrieron heridas y unas 7.000 familias han quedado afectadas en la última semana en Paraguay, donde también se reportan dos militares desaparecidos tras quedar atrapados en un vehículo arrastrado por una riada.
Así lo informaron la ministra de Salud Pública y Bienestar Social, María Teresa Barán, y el titular de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Arsenio Zárate, un día después de que un tornado golpeara la zona de Guaica, en el municipio de San Estanislao, departamento de San Pedro (norte).
Barán, quien se desplazó hasta San Estanislao, lamentó la muerte de una niña en medio del temporal e indicó que otras 16 personas fueron asistidas y dadas de alta.
Otra mujer de la tercera edad fue trasladada al hospital del Trauma en Asunción por "precaución, pero está fuera de peligro", detalló la ministra, citada en un comunicado de su despacho.
El director del Hospital Regional de San Estanislao, Federico Ramírez Mello, confirmó que la pequeña, de 11 años, sufrió " traumatismo craneoencefálico grave" y fracturas en un brazo. Un hermano de la niña también sufrió heridas, según el funcionario.
Ramírez relató al canal ABC que al llegar a atender a un morador que pidió su ayuda se encontró "con una escena de película", debido al grado de destrucción tras el tornado. "Me asusté porque antes de llegar al local, yo empecé a ver cómo la gente particular empezaba a acarrear los heridos", describió el médico, quien dijo que temió "lo peor", ya que había cables de alta tensión en la zona, lo que obligó al corte inmediato del servicio por parte de la Administración Nacional de Electricidad (Ande).
Con la muerte de la pequeña se elevan a dos las víctimas mortales del mal tiempo que ha azotado al país. El sábado pasado, una octogenaria perdió la vida después de que su vivienda en la localidad de Mbocayaty del Yhaguy, en el departamento de Cordillera, fue impactada por los fuertes vientos producidos por otro tornado.
El director de Meteorología e Hidrología, Eduardo Mingo, declaró a la radio ABC Cardinal que el tornado que azotó Guaica, que hizo volar los techos de numerosas viviendas y arrastró árboles, sería de categoría F1 en la escala Fujita-Pearson, con vientos estimados de 135 a 175 kilómetros por hora.
Por otra parte, Zárate dijo a la misma emisora que hasta el momento contabilizan unas 7.000 familias --aproximadamente 35.000 personas-- afectadas por las lluvias y los tornados que se han concentrado en la zona central y la región oriental del país.
El funcionario advirtió que en las poblaciones de Ayolas, en el departamento de Misiones (sur, fronterizo con Argentina), Coronel Martínez (Guairá), San Cosme y Damián (Itapúa, que también linda con Argentina), Hernandarias (Alto Paraná, colindante con Brasil), Laurel (Canindeyú, norte) y Cerrito (Ñeembucú) se contabilizan unas 2.000 familias afectadas.
Además, en esta jornada prosiguen las labores de búsqueda de dos militares que se dirigían en la madrugada del jueves hacia la residencia del comandante del Ejército, general César Augusto Moreno, en Lambaré, cuando quedaron atrapados por una fuerte corriente de agua que inundó varias calles de esa ciudad vecina a Asunción.
Moreno, quien se desplazó hasta el área de búsqueda, indicó que en el operativo participan integrantes de las Fuerzas Armadas, de la Fuerza Aérea, del comando logístico, entre otros. "No tengo palabras para expresar mi profundo dolor como comandante", declaró Moreno a los periodistas. -