Germán Cano, el futbolista que nació en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, se consagró campeón y goleador de la Copa Libertadores, el torneo del clubes más importante del continente. El delantero, surgido en Lanús, anotó en la final ante Boca, alcanzó los 13 goles en la edición 2023 y quedó en la historia como el máximo goleador del equipo tricolor en el certamen internacional.

El tanto convertido ante el conjunto xeneize tuvo un sello distintivo que se replicó en casi todos los goles del "Flu" a lo largo de esta copa: el desborde inmarcable de laterales como Xavier y Marcelo por las bandas, seguido de un centro atrás, que siempre encontró a Cano bien posicionado y libre de marcas. El olfato goleador, el correcto sentido del posicionamiento y la lectura de la jugada, son características que, a lo largo de su carrera, le permitieron al futbolista argentino anotar semejante cantidad de goles.

Hijo de una humilde familia del conurbano bonaerense, el delantero nació el 2 de enero de 1988 y arrancó a jugar en las inferiores de Lanús a los nueve años. Su mamá ayudaba en la institución repartiendo el pan y el mate cocido, para que él y sus compañeros se alimentaran después de entrenar. Es hincha del "granate", y de hecho, usa el 14 en su camiseta, en referencia a la barra brava de Lanús. Con ese número en la espalda, el delantero condujo al Fluminense a la gloria máxima.

El recorrido goleador durante la copa

En la Copa Libertadores 2023, la racha goleadora del delantero lomense comenzó en la fecha 1 de la fase de grupos y fue ante Sporting Cristal. En Perú, Fluminense se impuso por 3 a 1 y Cano anotó dos goles. Primero pescó un rebote del arquero para estampar el empate, y luego dio vuelta el resultado con a un solo toque. En la fecha 3, se despachó con un triplete ante River Plate, cuando Fluminense aplastó por 5 a 1 al equipo de Martín Demichelis, y Cano se convirtió en el tercer jugador de la historia en anotarle un hat-trick al conjunto millonario en el máximo torneo continental, detrás de Luciano Figueroa (San Lorenzo, 1973) y Fernando Salinas (Bolivar, 1991). Los tres tantos fueron frutos de la misma receta: desborde y centro atrás. En el primero, Cano eludió a tres jugadores y soltó un zurdazo furibundo. En los otros dos, simplemente la empujo debajo del arco.

En la fecha 6, en Brasil, el goleador marcó el tanto del empate 1 a 1 frente a Sporting Cristal. Luego de bajar un cambio de frente con el pecho, el lomense soltó un derechazo letal que se incrustó en la parte baja del palo derecho y que significó la clasificación a la siguiente fase de la copa Libertadores. Fluminense finalizó la fase de grupos en el primer lugar con 10 puntos y 10 goles a favor, de los cuales Cano marcó seis. En octavos de final, el conjunto carioca venció a Argentinos Juniors por un global de 3 a 1. En esa fase, el delantero no marcó goles en ninguno de los dos partidos.

Los cuartos de final fueron testigos del regreso goleador de Cano. Fluminense enfrentó a Olimpia de Paraguay, un rival durísimo y con historia copera. En la ida, disputada en el Maracaná, el "Flu" se impuso por 2 a 0 y el delantero marcó un verdadero golazo. Luego del cabezazo de un compañero, que metió la pelota bombeada al área, el lomense se plantó firme, corrió con su cuerpo al defensor, y en el mismo giro  la enganchó de volea para romper el arco paraguayo. En la revancha, disputada en Asunción, Fluminense ganó 3 a 1 y el lomense volvió a ser figura gracias a un doblete. Primero, empujó a la red un rebote, y minutos más tarde, eludió a un defensor guaraní y definió con jerarquía ante la salida del arquero.

Las semifinales fueron una batalla. Fluminense chocó con Internacional de Porto Alegre, el equipo dirigido por Eduardo "Chacho" Coudet que buscaba alcanzar un lugar en la final de este sábado. La ida, con Fluminense como local, fue empate 2 a 2, y el argentino selló otro doblete. Primero abrió el partido con un derechazo que engañó al arquero rival, que esperaba que Cano abriera el pie para definir. El encuentro se hizo cuesta arriba cuando Inter lo dio vuelta, pero el delantero puso el pecho una vez más y rescató un empate gracias a una impecable volea dentro del área chica.

En el partido de vuelta, disputado una semana más tarde, Inter fue local y demostró un dominio absoluto sobre Fluminense. No solo desde el resultado, que fue favorable para el conjunto de Porto Alegre desde el minuto 10, sino también desde el juego. Luego de que Inter fallara cuatro ocasiones claras de gol a lo largo del match, el "Flu" tuvo una ráfaga letal a nueve minutos del final y Cano fue protagonista. Primero asistió a su compañero John Kennedy, que estampó el empate en el minuto 81. Seis minutos después, el propio Cano aprovechó la receta infalible del centro atrás y estampó el 2 a 1 definitivo, que le permitió a Fluminense alcanzar la final del torneo de clubes más importantes de América, para luego consagrarse campeón.

La trayectoria

El delantero debutó como profesional en Lanús en 2008, cuando tenía 20 años. Luego de marcar dos goles en 24 partidos, Cano fue cedido a préstamo a Chacarita Juniors y sólo registró un gol. Después se fue a Colón de Santa Fe, donde no marcó goles. Tras las malas cesiones en los clubes del país, en 2011 el delantero se fue a Colombia, para defender la camiseta de Deportivo Pereira. Su nivel repuntó y anotó 10 goles en 18 partidos, lo que lo ubicó como goleador de la Liga colombiana. Su siguiente destino fue Nacional de Paraguay, donde marcó sólo dos tantos.

En su regreso a Colombia, Cano firmó contrato con Independiente de Medellín, lugar donde explotó al máximo todo su talento. El lomense se convirtió en el máximo goleador del club colombiano, gracias a 129 goles en sólo 196 partidos. Lo logró gracias al cúmulo de las dos etapas que tuvo en el club azul y rojo. Primero, entre 2012 y 2015. Después, de 2018 a 2020. En el medio, Cano viajó a México para ponerse las camisetas de León (13 goles) y Pachuca (8 tantos).

Luego de hacer historia en Colombia, el fútbol brasileño se fijó en él. Vasco Da Gama compró su pase y allí, en Río de Janeiro, el bonaerense convirtió 43 goles en 101 partidos. Luego de esa satisfactoria experiencia, el delantero recaló en Fluminense, su equipo actual, donde registra 81 goles en 124 partidos. Sus altísimos rendimientos despertaron los elogios de todo el mundo futbolero. Felipe Melo, histórico jugador brasileño y compañero del bonaerense, expresó en su cuenta de Instagram: "El mejor 9 que hay ¿Qué espera Scaloni para llamar a Germán Cano?".

Más allá del impulso de sus compañeros, Cano destacó en más de una ocasión que "la convocatoria es dificil porque depende de muchos factores", y que entiende "lo que representa llegar a un seleccionado con todos los jugadores tan buenos que tiene la selección". "Vienen trabajando juntos hace 3 o 4 años, lo único que puedo hacer es dar lo mejor por Fluminense. Lo que tenga que ser, será. Amamos la selección argentina y siempre queremos que le vaya bien", expresó el goleador de 35 años que, en toda su carrera, marcó 282 goles.