La creación del Instituto Nacional de las Mujeres , INAM, que funcionará en reemplazo del Consejo Nacional de las Mujeres, según se publicó hoy en el Boletín Oficial, fue celebrada por una parte del movimiento feminista porque “jerarquiza al organismo que genera políticas públicas”, aunque algunas dirigentes advirtieron sobre la necesidad de aumentar el presupuesto destinado a la lucha por la igualdad de géneros.
“Luego de 25 años de existencia, el Consejo se encontraba como un organismo que se perdía en la estructura estatal; con la creación del INAM como un ente descentralizado ganamos autonomía, manejo de presupuesto y la posibilidad de ampliar el marco de acción; es en definitiva la jerarquización del organismo que rige las políticas públicas de género”, dijo Fabiana Túñez, quien dirigirá el INAM luego de ejercer la misma función en el CNM.
En los argumentos de la creación del INAM se establece que tiene como finalidad “potenciar los lineamientos de la Ley N° 26.485, profundizando un modelo inclusivo y de participación con equidad”.
Hasta el momento, el CNM funcionaba bajo el Consejo Nacional de Políticas Sociales, presidido por la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y dentro de la órbita de Presidencia de la Nación. “El INAM será un organismo descentralizado con rango de Secretaría de Estado que funcionará dentro de la órbita de Desarrollo Social y este cambio nos brinda un presupuesto de manejo directo que hasta el momento no teníamos”, señaló Túñez. Mabel Bianco, de la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM), sostuvo que “nos parece auspicioso que se eleve el rango del organismo, entendemos que tendrá mayor autonomía y manejo de su presupuesto lo que le dará mayor agilidad porque elimina trabas burocráticas”.
La dirigente socialista y especialista en cuestiones de género María Elena Barbagelata sostuvo que “la pelea histórica del movimiento de mujeres era elevar al organismo (CNM) a rango de ministerio” y consideró que con la reforma que ubica al INAM en De- sarrollo Social “se pierde la oportunidad de priorizar la lucha por generar mayores niveles de igualdad en una sociedad con profundas conductas discriminatorias”.
Desde la agrupación feminista y socialista Las Rojas, Manuela Castiñeiras señaló que “no es una noticia ni buena ni mala ya que lo que esperamos es que se fije un presupuesto que atienda a los problemas de base que reproducen las violencia de género. Más allá de la autarquía o de a qué órbita pertenece, el tema es la decisión política de luchar contra la violencia hacia las mujeres”.