El Fondo Monetario internacional iniciará, a fin de mes, el análisis de los criterios del otorgamiento y los resultados de la aplicación del préstamo stand by a la Argentina por 57 mil millones de dólares en el año 2018, cuando Mauricio Macri gobernaba el país. El organismo financiero confirmó este lunes la información que había adelantado el ministro de Economía, Sergio Massa, en una entrevista que concedió el último domingo. La Oficina de Evaluación Independiente del FMI, que no depende de la Dirección del FMI sino de su Junta de Gobierno (el cuerpo que integran todos los países miembro), será la encargada del trabajo, que comenzará a fines de noviembre con una visita de una misión de ese cuerpo de analistas.
Si bien este tipo de análisis es habitual en los créditos del organismo, en este caso lo particular es que el préstamo fue otorgado en condiciones "excepcionales", tanto por el monto en relación a la cuota del país receptor, como por la premura con la que se resolvió.
"La evaluación analizará el diseño y aplicación de los principales elementos de la política de acceso excepcional", señala el comunicado de la IEO (por su sigla en inglés). Es decir, si correpondía el otorgamiento del crédito conforme a las necesidades del país en aquel momento y las perspectivas de solución que el programa acordado ofrecía.
En los términos que expresó Massa el anuncio de la revisión, lo que el Fondo va a investigar es "la fuga de divisas" en la que derivó al menos las dos terceras partes del dinero prestado. Otros sostienen, entre ellos el ex director para el hemisferio occidental del FMI, Alejandro Werner, que eso no es materia de análisis de la misión de la Oficina de Evaluación.
Sin embargo ésta, en su comunicado, especifica que analizará "los cuatro criterios de acceso excepcional (necesidades de balanza de pagos del país, la sostenibilidad de su deuda, su acceso a los mercados y las perspectivas de éxito del programa), los procedimientos reforzados para la toma de decisiones, y las evaluaciones a posteriori".
Lo que la IEO tendrá sobre la mesa, al momento del análisis, es que ninguno de esos criterios se cumplió, la balanza de pagos quedó fuertemente dañada por la fuga de divisas, la propia deuda asumida con el FMI resultaba insostenible, el país no recuperó el acceso a los mercados finan cieros y en cuanto a la estabilizacion de las variables financieras (inflación, tasas de interés, equilibrio fiscal y cambiario), el fracaso del programa fue rotundo.
La primera visita de la misión de la IEO llegará a fines de noviembre y se prevé que la evaluación total "esté finalizada a finales de 2024", según señala la comunicación del organismo.
Por otra parte, este lunes el gobierno nacional le pagó al FMI un vencimiento por 790 millones de dólares en concepto de intereses, que se abonaron con yuanes que el gobierno obtuvo mediante la ampliación del crédito swap otorgado por el gobierno de China.
El resultado catastrófico del programa acordado en 2018 es señalado no sólo en documentos internos del FMI, como el balance que hizo el propio staff técnico del organismo en diciembre de 2021, sino por los actuales aliados del macrismo, pero toman distancia de las decisiones de su gobierno y su equipo económico de entonces (Luis Caputo, Nicolás Dujovne y Federico Sturzennegger, en primera línea).
"Lo que investigará el FMI no es si los amiguitos de Toto Caputo estaban entre los que fugaban, sino si el préstamo sirvió para algo bueno para el país y es obvio (a la luz de los resultados) que no", escribió el diputado nacional José Luis Espert, hoy en Juntos por el Cambio, en su cuenta de redes sociales.
"El FMI nunca le debería haber dado 1.100% de la cuota a un gobierno al que ya no se le podía creer ni el 'buen día'. Todos culpables. Igual que nuestra tragedia económica en democracia: es culpa de los políticos y de los que votamos a esos pésimos políticos", agregó.