En el marco de las paritarias estatales, el Ministerio de Hacienda de la Provincia de Buenos Aires ofertó un aumento del 15 por ciento para el mes de noviembre, con reapertura de las negociaciones en diciembre, pero la oferta fue rechazada tanto por los docentes como por los sindicatos de empleados estatales agrupados en la Ley N° 10.430. Por esa razón, se llamó a un cuarto intermedio a la espera de una mejoría en el ofrecimiento. 

Desde la seccional provincial de UPCN explicaron que septiembre fue el último mes que se cobró con un incremento en los salarios. En ese momento, el crecimiento de los sueldos para los estatales alcanzó el 95 por ciento. Pero la oficialización de la inflación de ese mes hizo que a lo largo del 2023 la suba de precios llegue al 103,2 por ciento, ubicando a los haberes bonaerense a más de ocho puntos debajo de la inflación en el mes de octubre. 

“Con una estimación de entre un 8 y 9 por ciento de inflación para octubre, sumada a lo que habrá en noviembre, el aumento de un 15 por ciento en el sueldo de noviembre nos parece insuficiente”, aclara Juan Pablo Martín, secretario gremial de UPCNBA y partícipe de la mesa de negociaciones.

Los cálculos del representante de la organización comandada por Fabiola Mosquera advierten que, al 30 de septiembre, los salarios de los trabajadores estatales se ubicaron un 8,2 por ciento por debajo de la inflación. A eso se le sumarán los puntos del mes de octubre, y luego los de noviembre. “El ofrecimiento inicial es insuficiente, pero marca una pauta de discusión, sabiendo que la provincia ya propuso hacer una reapertura en diciembre”, aclara.

Además, Martín reconoce que hubo una “buena receptividad” de los planteos realizados por los sindicatos de parte de la provincia y entiende como “lógica” la propuesta hecha por el Ejecutivo. El siguiente paso es aguardar por una nueva convocatoria tras el llamado a un cuarto intermedio.

Unanimidad

El rechazo fue unánime de parte de todas las organizaciones sindicales que representan a los empleados públicos de la 10.430, al cual sumaron un nuevo planteo: que las discusiones que arranques las negociaciones del 2024 arranquen en enero y no en marzo. “El primer acuerdo suele llegar a fines de febrero o principios de marzo de cada año y eso se cobra recién en abril porque está sujeto al calendario docente, y no se suele contemplar la pérdida de enero y febrero”, señala Martín.

Según su perspectiva, los docentes y los estatales son “dos universos distintos”. “Los docentes cuentan con el Fondo de Incentivo Docente que son aportes nacionales, tienen otra realidad respecto a la eximición de ganancias donde son más beneficiados que nosotros, y son cuestiones que celebramos, pero que hacen necesario que las negociaciones sean diferentes”, remarca Martín.

Más allá de esta postura, no deja de señalar que dentro de los trabajadores agrupados bajo la Ley 10.430, están los auxiliares docentes, y también un sector de trabajadores de la salud. “A partir de bonificaciones sectoriales, por suerte han estado mejor que el resto de los empleados estatales de la Ley, por eso es importante tener ofrecimientos salariales que contemplen todas las circunstancias”, insiste.

En el caso de ATE - Provincia, se hizo presente Claudio Arévalo, el nuevo secretario general de la organización, quien valoró la convocatoria, pero pidió a la administración provincial "un esfuerzo más". 

En el marco de los reclamos presentados, también pidió que el día del trabajador estatal se encuentre contemplado en el calendario escolar, la agilización de los pases a planta permanente, que no le pidan a los auxiliares los antecedentes penales "ya que fueron presentados en diversas oportunidades y genera demoras y vencimientos", y que se reforme la edad jubilatoria similar a la de los docentes. Además de un aumento de asignaciones familiares y del porcentaje del tope, así como la continuidad de todas las trabajadoras y trabajadores del artículo 13.

El rechazo a la oferta inicial también había sido la postura del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), luego de la convocatoria que tuvo lugar el martes. “Sostenemos nuestro legítimo reclamo de un incremento salarial que garantice el poder adquisitivo de todas y todos los Docentes bonaerenses, como así también que se mantenga en vigencia la cláusula de monitoreo, revisión y actualización, para garantizar que las y los Educadores no pierdan salarialmente contra la inflación”, informaron en un comunicado.

El turno de los judiciales será el jueves, pero fuentes del gremio adelantaron a Buenos Aires/12 que, de realizarse una propuesta de similares características, se acoplarían a la postura de los estatales y los docentes.

El conflicto con la Municipalidad de La Plata

Para UPCN los días vienen siendo agitados en la ciudad de las diagonales. Tras varios días de reclamos para alcanzar un incremento salarial para los trabajadores municipales, y medidas de fuerzas que incluyeron un nuevo cese de tareas el último lunes, Martín explica que se encuentran a la espera del llamado del Ministerio de Trabajo bonaerense para la lectura del dictamen que reconozca al gremio como actor necesario en la mesa paritaria local.

“Queremos por todos los medios que Julio Garro, el intendente saliente y responsable de ocho años desastrosos para la ciudad, otorgue un aumento al mes de septiembre que contemple la pérdida salarial a lo largo del año”, pide Martín. Las estimaciones del gremio y su posterior reclamo radican en el 82 por ciento de aumento dado por Garro en lo que va del 2023, quedando a más de 20 puntos por debajo de la inflación, y trece por debajo de lo brindado por la Provincia.

“Sería una irresponsabilidad más de Garro entregar una bomba de tiempo que contemple un atraso salarial del 58 por ciento a mes de diciembre”, señala con énfasis el representante de UPCNBA. “Con un 140 anual de inflación y con sólo aumentos del 82 por ciento, y en sueldos de hambre, estaría dejando un problema muy grande y castigando a los trabajadores municipales el 10 de diciembre”, advierte.

Además, agrega, lo salarios de la Municipalidad son "muy bajos", por lo que “no es lo mismo un atraso del 10 por ciento en un salario de 500 mil pesos que en uno de 50 mil”. “Estamos buscando por todos los medios que se actualice ese monto y después hablar con la gestión entrante y así discutir el cierre 2023 con aumentos salariales para este año”, remarca.

En este sentido, Martín cuenta que ya existe un pedido al Ministerio de Trabajo bonaerense para generar un “ámbito tripartito”, que incluya a los trabajadores y a los representantes tanto de la gestión saliente como de la entrante para "abordar el tema de manera responsable, trayendo los números reales sobre la mesa”.