En la jornada de este viernes, el Instituto de Planificación Control y Servicios Ambientales de La Rioja convocó a una conferencia de prensa para presentar los resultados de la investigación sobre la pérdida de flamencos en la reserva natural Laguna Brava. Los especialistas concluyeron que la causa de la mortandad no fue la gripe aviar, como se especulaba inicialmente, sino el cambio de condiciones climáticas en el espejo de agua.
Hernán Rojas, biólogo y vicepresidente del Instituto de Servicios Ambientales, explicó que las alteraciones climáticas impactaron en la dinámica de la Laguna, provocando la ausencia de microorganismos, algas y crustáceos, que son fundamentales para la alimentación de los flamencos. Además, señaló que el descongelamiento tardío impidió que los alimentos proliferaran a tiempo para satisfacer las necesidades de las aves.
En este contexto, Rojas destacó la importancia de establecer un control mensual y bimestral para evaluar las características físicoquímicas y microbiológicas del agua y el suelo, a fin de comprender la dinámica de la Laguna y llevar a cabo un monitoreo exhaustivo que permita prevenir futuros eventos de este tipo.
Franco Alizzi, representante de SENASA La Rioja, informó sobre el estado de los flamencos fallecidos, indicando que presentaban un bajo índice muscular y escaso contenido alimenticio en sus estómagos. Los resultados de las investigaciones llevaron al levantamiento del bloqueo a la reserva, y se anticipó la apertura turística, aunque con protocolos estrictos para minimizar el contacto de los visitantes con las aves y evitar posibles situaciones de estrés.
Margarita Suárez, bióloga y subsecretaria de Bienes Comunes y Naturales, detalló la intervención realizada para contrarrestar la falta de alimento. "Arribamos al lugar donde observamos que la Laguna se estaba descongelando y los flamencos buscaban comida. Llevamos alimento porque ya teníamos la presunción de la falta de alimento y al día siguiente los flamencos estaban mejor, su comportamiento era normal y no ocupaba todo su tiempo en buscar comida". Suárez subrayó que los flamencos fallecidos pertenecían a la misma especie y que se contabilizaron alrededor de 250, mientras que aún quedan 778 flamencos en total.
La bióloga también abordó las preocupaciones de algunos asambleístas que atribuyeron la causa de las muertes a la exploración de litio. Suárez desestimó esta hipótesis, indicando que los estudios no han encontrado indicios de contaminación en el agua y que la exploración de litio se lleva a cabo en un lugar físicamente no conectado con Laguna Brava "hay varias barreras geograficas que impiden la conexión de una y otra" aseguró subsecretaria de Bienes Comunes y Naturales. A pesar de ello, mencionó que desde la empresa minera reportaron tres flamencos muertos en el Salar El Leoncito.
Mientras las condiciones climatológicas mejoran y se espera una disminución de la mortandad, las autoridades insisten en la importancia de continuar con el protocolo de vigilancia de gripe aviar y realizar controles periódicos para mantener un seguimiento detallado de la Laguna Brava.