Representantes de la Cámara Nacional Electoral (CNE) y la Justicia Electoral ratificaron la “robustez” del sistema de custodia y seguridad de urnas que se desplegarán durante las elecciones del próximo domingo, y de esta manera despejaron los fantasmas de supuestas “irregularidades” agitados por dirigentes de La Libertad Avanza (LLA) y sus aliados de la oposición.
El secretario de Actuación Electoral de la CNE, Sebastián Schimmel, aseguró que el sistema tiene una "serie de garantías que son muy robustas", tanto en el despliegue como en el repliegue de urnas, documentación y demás material utilizado durante los comicios.
Todo el dispositivo "tiene una custodia y operativo de seguridad muy severo y estricto” porque si bien lo hace el Correo Argentino, “el despliegue se hace con un operativo de custodia del Comando General Electoral que son las Fuerzas Armadas y de Seguridad", puntualizó a un canal de noticias.
Por su parte, la jueza federal con competencia electoral, María Romilda Servini, fue más explícita en su rechazo a las sospechas sembradas durante los últimos días por Javier Milei. “En la Argentina no se puede decir que hay posibilidad de fraude”, sentenció.
La magistrada dejó claro que las del próximo domingo serán “elecciones serias” como todas las anteriores y calificó como “muy seguro” al sistema comicial.
“No hay fraude –prosiguió-. No descarto que en alguna urna se pueda producir cierta alteración de los votos, pero tiene que ser algo que esté arreglado con la autoridad de mesa, con los fiscales. Es realmente muy poco probable que eso suceda porque acá somos los jueces los que estamos a cargo de cada elección.”
El seguimiento de los votos
En tanto Schimmel, que es el funcionario que está a cargo del escrutinio definitivo, explicó que desde 2015 “se ha sumado seguimiento con GPS de los camiones troncales que distribuyen para el despliegue y el repliegue" de urnas, de modo tal que si alguna sufre alguna alteración en su recorrido, queda el registro del rastreo.
Por otra parte, explicó que en un balotaje “gana la agrupación que más votos obtenga", de manera que el candidato que tenga un voto más que otro va a será el ganador.
Aclaró también que el voto en blanco no se computa como nulo y "no beneficia ni perjudica especialmente a ninguna de los dos candidatos, sino que queda afuera".
Además, indicó que la justicia electoral se encargó de "facilitar las vías" para hacer las denuncias sobre posibles irregularidades desde el portal electoral.gob.ar.
“La Argentina tiene un sistema es muy confiable”
La jueza Servini subrayó que el sistema es “sumamente confiable” y reveló que, inclusive, así se lo dijeron cuando viajó a varios países: “Que la Argentina tiene un sistema muy confiable. Es muy seguro”, dijo a un matutino porteño.
Además, describió al proceso electoral como “una artesanía” porque los controles están “muy encima de cada mesa, de cada escuela” donde se vota.
Inclusive reveló que debió “mandar gente a la sede de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) donde vota Milei porque la última vez se amontonó la gente y los que estaban empadronados allí no podían votar”.
Por otra parte, defendió la labor de sus colegas. “Son todos muy responsables. Tenemos un grupo de WhatsApp al que nos conectamos permanentemente. Somos los 24 jueces federales con competencia electoral, nos conectamos y tratamos de evitar cualquier problema que pueda surgir”, cerró.