Tropas y tanques israelíes tomaron por asalto durante varias horas el hospital más grande de la Franja de Gaza, donde cientos de médicos, pacientes y desplazados palestinos, incluidos recién nacidos, están atrapados sin electricidad y casi sin provisiones, en el marco de la ofensiva de Israel contra el movimiento islamista Hamas. El Ejército israelí aseguró que en el operativo encontró "armas y equipos militares", aunque esa versión fue rechazada por Hamas. El hospital Al Shifa se encuentra hace días en el centro de los combates entre el movimiento palestino y las tropas de Israel, que juraron "aniquilar" a Hamas en respuesta al ataque lanzado el 7 de octubre.
"Manos arriba"
El miércoles temprano decenas de soldados israelíes irrumpieron en el hospital Al Shifa, pidiendo que "todos los hombres de 16 años en adelante salgan manos arriba hacia el patio interior para rendirse". Periodistas presentes en el lugar contaron que los soldados interrogaron a gente en el hospital, cachearon a mujeres y niños llorando y fueron de habitación en habitación, disparando al aire, en busca de combatientes de Hamas. Los tanques israelíes, que rodeaban desde hace días el complejo, entraron y se apostaron delante de varios servicios.
El director de los hospitales de Gaza, Mohammed Zaqout, dijo a la cadena de noticias Al Jazeera que algunos soldados abrieron fuego contra personas que intentaron abandonar uno de los pasillos del hospital, donde según la ONU hay unos 2.300 médicos, pacientes y desplazados. Horas antes el Ejército israelí dijo en un comunicado que llevaba a cabo una operación "precisa y selectiva contra Hamas" en una zona específica del hospital separada de los lugares donde había médicos y pacientes.
Las tropas israelíes se retiraron del hospital al anochecer y tomaron posición en torno al complejo hospitaliario. El Ejército israelí dijo que "un centro de mando operativo, armamento y activos tecnológicos fueron encontrados en el edificio de resonancia magnética" del hospital. De acuerdo al Ejército, "en registros en uno de los departamentos del hospital, las tropas localizaron una sala con activos tecnológicos, junto con equipos militares y de combate utilizados" por Hamas.
La organización islamista palestina contradijo esa versión a través de su ministerio de Salud, que aclaró que Hamas no autoriza la tenencia de armas en esos establecimientos. El viceministro de Salud de Hamas, Yusef Abu Rish, pidió desde el hospital que la ONU y la comunidad internacional intervengan inmediatamente para poner fin a la operación.
El Comité Internacional de la Cruz Roja indicó en un comunicado que "está extremadamente preocupado", recordando que "los civiles deben estar protegidos en todo momento". El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, indicó que las instalaciones sanitarias deben ser protegidas de todos los actos de guerra y advirtió que "la incursión militar israelí en el hospital de Al Shifa es totalmente inaceptable.
El presidente francés, Emmanuel Macron, condenó el miércoles "con la mayor firmeza todos los bombardeos contra las infraestructuras civiles que deben ser protegidas en virtud de nuestro derecho internacional y del derecho humanitario". Su par turco, Recep Tayyip Erdogan, calificó a Israel de "Estado terrorista". En tanto el gobierno de Qatar reclamó una investigación internacional sobre las operaciones militares israelíes contra hospitales de la Franja de Gaza y denunció la incursión de este miércoles en el de Al Shifa como un "crimen de guerra".
EE.UU. rechaza los ataques a hospitales
El martes por la noche el Ejército israelí dijo que hizo "saber a las autoridades competentes de Gaza que todas las actividades militares en el hospital debían terminar en 12 horas", pero que "este no fue el caso desgraciadamente". La Casa Blanca aseguró el martes que Hamas y su aliado Yihad Islámica, ambos considerados terroristas por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel, "operan un núcleo de comando y control desde Al Shifa".
Sin embargo este miércoles John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad de Estados Unidos, aclaró que no dio luz verde a Israel para que ataque al principal hospital de Gaza. "No queremos ver hospitales atacados desde el aire. No queremos que civiles inocentes, pacientes y personal médico sean víctimas del fuego cruzado entre Hamas y las Fuerzas de Defensa de Israel. Creemos que los hospitales deben ser protegidos", aseguró Kirby.
En Israel el primer ministro Benjamin Netanyahu se vanaglorió del ataque al hospital y dijo que no hay lugar en Gaza al que no llegue el Ejército israelí en su ofensiva. "Nos dijeron que no llegaríamos a las afueras de la Ciudad de Gaza y lo hicimos, nos dijeron que no entraríamos a Al Shifa y lo hicimos", aseguró Netanyahu y agregó: "Alcanzaremos y eliminaremos a Hamas y traeremos de regreso a los rehenes".
Normas del derecho internacional relativas a la guerra establecen que los hospitales deben quedar al margen de hostilidades armadas, salvo que sean usadas con fines militares, lo que puede convertirlos en blancos legítimos de eventuales ataques. Hamas niega todas las acusaciones y aseguró que las afirmaciones estadounidenses daban "luz verde a Israel para cometer nuevas masacres". El director de Al Shifa, el doctor Mohammed Abu Salmiya, anunció el martes que al menos 179 cadáveres fueron enterrados en una fosa común.
"No salvará más vidas"
La Franja de Gaza sufre desde el 9 de octubre el asedio de Israel, llevando a su población a sobrevivir en condiciones humanitarias desastrosas, sin suministros básicos. Según la ONU unos 20 mil palestinos huyeron del norte del territorio desde el 5 de noviembre, tras la apertura por Israel de corredores de evacuación. La organización asegura que 1,65 de los 2,4 millones de habitantes de la Franja están desplazados.
El miércoles Israel permitió la entrada de unos 23 mil litros de combustible en el territorio palestino, bajo la condición de que solo sirva para transportar ayuda, indicó la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA). "Esto no salvará más vidas", consideró el director de la agencia, Philippe Lazzarini, en la red social X. La empresa palestina de telecomunicación Paltel, anunció que sus servicios quedarán suspendidos en unas horas por la falta de combustible.
En el centro de la Franja de Gaza, un nuevo ataque tuvo como blanco el miércoles un edificio en Deir al Balah. "Solo encontramos restos de mujeres y niños", contó un habitante de la ciudad, Awni al Duggi. El conflicto en Gaza es "una guerra contra la existencia de los palestinos", declaró el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas.
El 7 de octubre Hamas lanzó un ataque sorpresa en el sur de Israel en el que murieron unas 1.200 personas y otras 240 fueron secuestradas, según las autoridades israelíes. En respuesta Israel ha bombardeado a diario la Franja de Gaza. Más de 11.500 palestinos murieron en esos ataques, incluidos más de 4.710 niños según el ministerio de Salud de Gaza. El balance podría ser mayor ya que decenas de cuerpos yacen en las calles del norte de la Franja, pero el Ejército israelí dispara contra ambulancias y equipos médicos que tratan de acercarse a ellos.