El dólar blue subió 45 pesos este miércoles y terminó en 970 pesos. Durante algunas horas de la tarde llegó a tocar los 1000 pesos. A pocos días de las elecciones, y con un resultado incierto, se observan nuevamente conductas de especulación y presiones cambiarias. A pesar de esto, en los dólares financieros no hubo una tendencia definida. El dólar contado con liquidación bajó 0,3 por ciento hasta 872 pesos, en contraste con el MEP, que subió 1,6 por ciento, a 882 pesos.

La jornada estuvo marcada por el regreso del crawling peg como política de ajuste del tipo de cambio oficial. La autoridad monetaria subió el tipo de cambio mayorista a 353 pesos, es decir un alza diaria del 0,8 por ciento, tal cual había anticipado en las últimas semanas.

Desde mediados de agosto que el dólar oficial no se movía. El equipo económico había decidido dejarlo quieto durante tres meses, luego de la imposición del Fondo Monetario Internacional de hacer una devaluación del 20 por ciento tras las PASO.

A partir de ahora, el Banco Central señaló que lo irá haciendo subir gradualmente, con el objetivo de evitar apreciación en términos nominales. Se trata de una estrategia similar a la que había hasta agosto.

Gustavo Quintana, de PR Operadores de Cambio, recordó que esta medida ya "estaba programada e implica que a partir de ahora volvemos al sistema anterior de crawling actualizando los valores para llevarlos en principio con una suba del 3 por ciento en el mes".

Los consultores plantearon que el equipo económico cumplió efectivamente con los compromisos cambiarios. Sergio Chouza, director de Consultora Sarandí y economista, mencionó que "se cumplió con lo previsto en el press release del Fondo Monetario (FMI) y con lo que había anticipado Sergio Massa, el ministro de Economía, que iba a hacer tras la fijación del dólar mayorista".

Además, otros economistas mencionaron que volver a las micro devaluaciones es una medida importante para no perder competitividad. Por caso, el director de Epyca Consultores, Martín Kalos, dijo que "no hay que dejar que se abarate por demás el tipo de cambio dado que eso genera una perversión de los incentivos financieros, comerciales y económicos en general".

El dólar mayorista es el que efectivamente termina siendo referencia de importaciones y de las exportaciones. Su impacto en los precios del mercado interno fue muy claro en los últimos meses. Con la devaluación de agosto, provocó un fuerte salto de la inflación mensual hasta el 12 por ciento. Con la estabilidad de septiembre y octubre, permitió que el mes pasado la inflación baje a tasas de un dígito cercanas al 8 por ciento.

En cuanto a las reservas internacionales, la autoridad monetaria aprovechó la primera jornada de crawling peg para comprar 121 millones de dólares en el mercado de cambios, y en lo que va del mes acumuló 286 millones de dólares. Es un promedio de casi 30 millones de dólares por día hábil.

A nivel de los activos bursátiles, hubo una nueva baja de la bolsa porteña, que terminó la jornada con un retroceso del 0,8 por ciento. Las energéticas como la petrolera YPF y Transener fueron algunas de las que más perdieron, con bajas cercanas al 2 por ciento en la rueda.

Los bonos soberanos en moneda extranjera, mientras tanto, tuvieron un movimiento desparejo. Algunos títulos como el Bonar con vencimiento en 2041 tuvo un desplome del 8 por ciento, y terminó en niveles de 25 por ciento de paridad. Por el otro lado, el Global con vencimiento en 2035 marcó un avance del 3,0 por ciento, para ubicarse en 28 por ciento de paridad.

Por otro lado, se destacó el avance de los títulos en pesos que ajustan por inflación. Entre ellos sobresalió el aumento del 1,7 por ciento del TX26, que en lo que va del mes acumula un alza del 3,1 por ciento, y en lo que va del año una suba de casi 140 por ciento. Se trata de un bono que había sido muy castigado a mitad de agosto con el pánico financiero que generó Milei, y que a partir de la primera vuelta electoral rebotó fuertemente.