Poco menos de 45 minutos le bastaron a Javier Milei para ponerle finalizar, en Córdoba, su campaña electoral. Ante 16 mil personas, el candidato libertario tuvo su cierre en la tierra prometida del macrismo. "Conan es cordobés", dijo, en lo que fue el único acto fuera de libreto. Acompañado “por sorpresa” de la flamante socia Patricia Bullrich, pero no por Mauricio Macri, Milei no se apartó ni en una coma de la puesta en escena mostrada en Rosario o Mendoza. Con un guión antiperonista, calificó a la elección del domingo como "la más importante de los últimos 100 años" e insistió en fortalecer la fiscalización. De los socios locales de Juntos por el Cambio, la diputada Laura Rodríguez Machado dio el presente de manera orgánica.
“Hay que animarse a abrazar las ideas de Alberdi”, repitió el economista en un escenario montado en la calle Hipólito Yrigoyen, con banderas y amarillas que se extendía casi hasta la zona del Patio Olmos, a unas cuatro cuadras. Victoria Villarruel, Diana Mondino, Ramiro Marra y Agustín Laje fueron otros de los que completaron el estrado principal. Párrafo aparte para Karina Milei. La hermana del candidato fue presentada como “el responsable (sic) del 95 por ciento de esto”.
Misma historia vieja
Milei llegó a Córdoba en las primeas horas de la tarde y con media hora de retraso arribó a la convocatoria. Desde temprano, el tránsito se complicó en virtud de una serie de cortes preventivos para permitir el emplazamiento del escenario. Con el vestuario conocido, campera de cuero y buzo, Milei repasó cada uno de los tópicos conocidos en sus apariciones públicas. “Estamos en la elección más importante de los últimos 100 años”, comenzó. “Nos estamos yendo al mismísimo infierno, de qué salto al vacío me hablan”, bramó frente a aplausos y cánticos mezclados entre “Massa, basura, vos sos la dictadura”, “Libertad”, “La casta tiene miedo”.
“Tengo la seguridad de que ustedes los cordobeses nos van a acompañar para ir por 60 por ciento” de votos a nivel nacional. Ecuación que resulta del “54 por ciento que eligió una opción de cambio” al sumar los votos libertarios y los cosechados por Juntos por el Cambio en la primera vuelta.
“En el fondo, lo que estamos eligiendo es si queremos la tiranía de las mayorías, el populismo peronista o queremos volver a abrazar la libertad", repitió como a lo largo de la campaña. “Quiero pedirles que este domingo el miedo no le gane la esperanza, que sea la esperanza la triunfadora”, lanzó desde el escenario móvil emplazado a metros del Paseo del Buen Pastor, un centro comercial construido en el mismo lugar donde, durante la Dictadura Cívico Militar funcionaba la Cárcel del Buen Pastor.
Fue allí donde el 25 de mayo de 1975, 26 presas políticas protagonizaron la conocida fuga del Buen Pastor. 17 de ellas lograron huir, mientras que 9 continúan desaparecidas. La historia es relatada en la película Buen Pastor, una fuga de mujeres.
Milei también reiteró un llamado a reforzar la fiscalización para el domingo, en medio de las denuncias presentadas por su hermana ante la Justicia electoral por el papel de Gendarmería en el traslado de las urnas y la restricción, por decisión propia, de entregar boletas. “Es importante el trabajo que hagan los fiscales que responden a Bullrich y Macri porque son los que van a cuidar los votos porque los votos se dan y les vamos a ganar este domingo", indicó.
Villarruel también tuvo su momento en Córdoba. Lideró la avanzada con una visita 24 horas antes en la que aprovechó para pasearse por medios de comunicación. Parte cordobesa de estrategia de posicionar a su figura como la “voz de la templanza”. Con más pericia y manejo, aunque sin correrse del esquema previsto, la defensora de militares condenados por delitos de lesa humanidad dijo que “el momento en que Milei y yo resultemos electos, habrá esperanza tras 16 años de kirchnerismo”.
“Nos esperan cuatro años intensos, pero podemos asumir la responsabilidad que nos da la gente y estar a la altura, señaló la libertaria.En torno a la conocida postura en torno al Terrorismo de Estado, señaló que “no vamos a someter al pueblo a una venganza, pero los derechos humanos son para todos los argentinos”. “La democracia se nutre de verdad, memoria y justicia para todos. Al kirchnerismo solo le interesa mirar al pasado", finalizó.
Fue un acto para los propios, en la cuna del schiarettismo, donde Milei llegó a 770.000 votos. Una daga en la búsqueda de los 665.000 sufragios “huérfanos” que dejó la postulación del gobernador cordobés.
Mondino y Lemoine, en una
Antes del acto, Mondino hizo acto de presencia como una de las dueñas de casa. Enfundada en una camiseta alternativa de Talleres, Mondino “no tiene conocimiento” por la denuncia presentada por LLA ante la justicia electoral. “Estuve trabajando hasta hace 10 minutos antes de venir. No tengo ningún detalle. No me dijeron nada, No somos chusmas. Vamos a trabajar para fiscalizar. Diría que hay que pensar porqué hace falta tanto trabajo para fiscalizar”, explicó Mondino, quien dijo que “cree” que la fuerza cuenta dos fiscales por mesa.
Por su parte, la diputada electa Lila Lemoine insistió con la idea de privatizar los medios públicos. “Esa periodista (Laura Mayocchi) me estaba agrediendo”, se justificó ante la consulta del cronista de Canal 10, el canal universitario cordobés. “Privatícese”, dijo entre risas. “Considero que toda empresa privada es eficaz”, señaló.
“Conan es cordobés”
El diferencial respecto de otras presentaciones estuvo relacionado con la mención a Conan. “El panqueque y el fullero (por Sergio Massa) quiso hacerles creer que desprecio a los cordobeses. De qué me están hablando si el mejor regalo que medio la vida me lo dio Córdoba. Avísenle al panqueque que Conan es cordobés”, vociferó al referirse que su primer mastín inglés, luego clonado.
Banderas amarillas, argentinas y la guardia temprana del grupo denominado “Pumas Libertarios” fueron algunos de los datos distintivos del acto. El condimento peronista fueron los clásicos choripanes que desde temprano se instalaron en la calle.
Más allá de la concurrencia, importante en comparación a actos políticos recientes, lo cierto es que el número fue mucho menor al mostrado en 2019, cuando Macri cerró la campaña del balotaje contra Alberto Fernández.