River y Gimnasia buscarán hoy llegar a la final de la Copa Argentina, al cruzarse en la semifinal que jugarán en San Juan. El equipo de Marcelo Gallardo tiene este torneo como prioridad, ya que ganarlo le permitirá alcanzar el objetivo central de este segundo semestre del año: la clasificación para la Copa Libertadores de 2017. No parece una meta sencilla para los de Núñez. porque esta noche tendrán enfrente a un adversario que viene en alza en este torneo. El Lobo platense dejó en el camino  a Racing y San Lorenzo, en octavos y cuartos de final, respectivamente, pese a que en el campeonato de Primera División muestra un desempeño irregular.
Claro que River tampoco viene mostrando un rendimiento convincente en el actual torneo de Primera y en las últimas etapas de la Copa Argentina eliminó a rivales de menor fuste, como Arsenal y Unión. Ante ello, el Muñeco deberá apelar a toda su capacidad para convencer a sus dirigidos de que deberán exponer todo su potencial para no dejar pasar la chance de disputar otra final. Otro problema nada menor para el entrenador lo representa la ausencia de Jonatan Maidana en la defensa. El zaguero central, quien fue probado el lunes, dio muestra de que aún no pudo completar la recuperación del desgarro en el bíceps femoral derecho que sufrió frente a Unión, por los cuartos de la Copa Argentina, el pasado 28 de octubre. Así, el juvenil Lucas Martínez Quarta seguirá en la zaga central, acompañado esta vez por el ecuatoriano Arturo Mina, quien regresará al primer equipo, al igual que Andrés D’Alessandro, que lo hará por el uruguayo Rodrigo Mora.
Gimnasia, que por primera vez accede a las semifinales de la Copa Argentina, también tendrá bajas, ya que no contará con Maximiliano Coronel, suspendido por su expulsión frente a San Lorenzo. Su reemplazante sería el peruano Christian Ramos, aunque se abrió una chance para Mauricio Romero, de muy buen desempeño en el empate (1-1) ante Unión, el pasado lunes, por el campeonato de Primera.
Como dato histórico, cabe recordar que Gimnasia cuenta con el plus de la experiencia de Gustavo Alfaro: el entrenador ya ganó una Copa Argentina cuando era el director técnico de Arsenal, en la temporada 2012/2013.