Dos palestinos presos en Israel, Anás Shadid y Ahmed Abu Farah, están en huelga de hambre hace más de dos meses y corren riesgo de sufrir muerte súbita. Su abogada, Ahlan Hadad, informó que ambos fueron encarcelados hace más de dos meses sin cargos ni imputación de ningún delito y que “están en peligro”.

El Comité para Asuntos de los Prisioneros Palestinos indicó el sábado pasado que ambos han perdido parcial o completamente su capacidad de respirar, hablar, beber y oír. Además, advirtió que el gobierno israelí amenaza con alimentarlos por la fuerza.

En un informe a la Corte Suprema de Israel, Assaf Harrofeh, director del centro de salud donde fueron atendidos, afirmó que los dos huelguistas pueden sufrir daños severos en órganos vitales, lo que podría causarles incapacidad permanente e incluso la muerte.

"Fueron detenidos el 1º y el 2 de agosto. Las causas de su arresto son secretas, no las conocen ni ellos mismos", protestó su abogada.

Shadid y Farah se encuentran bajo “arresto administrativo”, una figura legal que data de los tiempos del protectorado británico y permite detener sin orden judicial ni explicación alguna, por tiempo ilimitado.

El Club de Prisioneros Palestinos informó en un comunicado que hasta marzo de este año había 700 palestinos encarcelados en prisiones israelíes sin acusación formal.