En plan de retomar la campaña, el presidente Mauricio Macri visitó ayer Chaco, un distrito en el que el oficialismo no resultó victorioso en las PASO. Junto al gobernador peronista Domingo Peppo, Macri se mostró optimista, prometió una reactivación económica y la creación de 200 mil puestos de trabajo en la industria de la madera. También condenó “la violencia” en la Argentina, como parte del discurso que enarbolaron desde la desaparición forzada de Santiago Maldonado. El mandatario seguirá de recorridas en los próximos días alternando entre las distintas provincias y el territorio bonaerense. Esta semana se concentrará más en el Conurbano y la provincia de Buenos Aires.
El comando de campaña de Macri no tiene pensado hacer grandes cambios con respecto a la estrategia que desplegaron en las PASO. Hay, eso sí, una lectura de los resultados para afinar en qué zonas se debe reforzar la campaña, para lo que utilizan el entrecruzamiento de datos del INDEC, de la ANSES, de cómo votaron en cada distrito y de las encuestas encargadas a la consultora de Jaime Durán Barba. Este uso de la información se conoce como “Big data” y les da una segmentación del electorado que les permite decidir dónde van a apuntar para mejorar los resultados para octubre. Quizás como resultado de este cruce de encuestas y focus groups, ayer Macri desembarcó en Chaco con la promesa de más trabajo para los trabajadores de la madera.
“¿Cómo están los chaqueños, hoy? ¡Cómo estamos! Vamos para arriba. No puedo creer... ¡Qué alegría estar nuevamente con ustedes!”, arrancó el presidente, en plan entusiasta. “Muchas veces me preguntan si no me canso de ir a una provincia a la mañana; otra a la tarde y vivir recorriendo el país. Y les digo: ‘Cómo me voy a cansar, si a cada lugar que voy me encuentro con argentinos llenos de esperanza, llenos de ganas, que están poniendo todo, que están avanzando en sus sueños que tuvieron durante tantos años”, afirmó durante un acto en Roque Sáenz Peña, y después de una recorrida que incluyó Pampa del Infierno –donde participó de la inauguración de la planta de acopio de Aceitera General Deheza– y Napenay.
“Vamos a empezar a construir casas de madera que son de excelente calidad”, anunció el presidente. En plan de prometer de cara a octubre, Macri aseguró que la construcción de casas de madera va a “generar 200.000 puestos de empleo en el Chaco y la Mesopotamia”. Lo acompañaban los ministros de Agroindustria, Ricardo Buryaile, y de Transporte, Guillermo Dietrich. Macri destacó la “recuperación” en su Gobierno del tren Belgrano Cargas, aunque omitió mencionar que el Grupo Macri tuvo su rol en el estado en el que quedó este medio de transporte cuando dejaron la concesión junto con Hugo Moyano. “Ya llevamos 203 kilómetros de vías en el Belgrano y no vamos a parar hasta terminar todo a mediados de 2019”, prometió Macri, ahora del lado del mostrador del Estado.
En su recorrida, el presidente no omitió la condena a “la violencia” que viene reiterando desde que empezó a recibir el reclamo por la desaparición de Maldonado. “Cambiar también es entender que la violencia no es la forma, no nos podemos expresar desde ese lugar. Es entender que tenemos que respetar al que piensa distinto”, sostuvo el mandatario.