La periodista y conductora Cynthia García reflexionó acerca de la postura que debe llevar a cabo la militancia durante los próximos años del mandato presidencial del ultraderechista Javier Milei, quien se impuso ante Sergio Massa en el balotaje de este domingo por amplia diferencia.

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Él imagina un mundo sin peronismo. 

Lo que nos pasa excede lo que podemos decir. Cómo calcular los riesgos sabiendo la vida incalculable. Entonces ocurre que nos quedamos enmudecidos. Tal vez formamos parte de un sector de la población que quedó enmudecida.

(José) Saramago dice que una forma de ceguera es la pérdida de la esperanza. Pero hay otras forma cegueras que también la dinamitan.

Tenemos que empezar a pensarnos. A transitar todas estas superficies repletas de pisadas superpuestas, esta confusión de marcas.

¿Qué vamos a construir de este común silencio? ¿Qué vamos a hacer con esto que nos pasa que excede lo que podemos decir? ¿De qué va a estar hecha toda esta legitimidad que junta Milei? ¿Qué va a pasar cuando esos votantes se enfrenten a lo que votaron?


"Se derrumbó este sistema político que conocíamos"

Se viene una época muy difícil. Nos va a demandar una reflexión profunda y muy sólida para planificar lo que se viene con esta legitimidad que sacaron.

Se derrumbó este sistema político que conocíamos. Probablemente tengamos que arrancar de cero, pero nosotros no nos podemos retirar.

Primero porque no tenemos dónde, porque somos parte de este pueblo.

No hay que enojarse con nuestro pueblo. Hay que pensar y reflexionar mucho. Cuidar a los compañeros. Construir una retaguardia, una resistencia, convivir, un colectivo, una sociedad, para empezar a reconstruirnos.

Anoche me acosté en shock. Y hoy todavía lo estoy. Porque en lo que creemos se derrumbó. Porque se votó una legitimación en lo que los integrantes de ese proyecto tienen el mismo discurso que Massera. Y hay apologías de la dictadura, entonces, ¿cómo no vas a estar en shock?

Hay que hacerse preguntas. Y nos vamos a tener que encontrar en las reflexiones de otros, para poder pensar juntos y pensar un común vivir. Porque de repente estamos descubriendo que vivir con otros no equivale a un común vivir. Hace falta advertir que el con otros hace mucho daño, bajo diferentes acciones.

El con otros puede comprimir la vida.

Entonces conviene renovar esa idea de un común vivir. Pensar más que en vivir con otros, en un común vivir para cercanías que no mandan ni prescriben, que no sancionan ni castigan, que no recompensan ni condecoran. Para cercanía que se saben delgadas, provisorias, gustosas, angustiadas.

Estas cercanías hoy están angustiadas. Estamos angustiadas. Nunca se sabe cuánto duele un dolor.

Y estamos en un naufragio en el sentido en que hay 11 millones de personas que se sienten a la deriva.

¿De qué madera nos agarramos? ¿Cómo hacemos para seguir? ¿Qué va a pasar con los mercados, con los juicios de lesa humanidad? ¿Y después con la educación?

Si nos agarramos de la propuesta electoral de Javier Milei, sabemos que lo que viene no va a ser bueno. Pero también sabemos que podemos resolverlo juntos.

Que lo que tenemos que hacer es eso, reconstruirnos colectivamente.

Nosotros sí tenemos la memoria puesta para llevarlo adelante.