El 15,6 por ciento de los porteños se ubicó durante el primer semestre del año por debajo de la línea de la pobreza. Los registros publicados ayer por la Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires representan una mejora de 3,8 puntos porcentuales frente al 19,4 por ciento observado en el mismo período de 2016. La reducción en los niveles de pobreza es inferior cuando en lugar de individuos se observan el desempeño de los hogares. En ese caso los datos pasaron 13,5 a 11,1 por ciento en un año. Con esos datos la pobreza alcanza a 496.000 porteños. 

 Por su parte, el índice de Indigencia cerró el primer semestre del año en el 3,9 por ciento frente al 5,6 por ciento de igual lapso de 2016. Entre los hogares la medición se redujo hasta 2,8 por ciento del 4,0 por ciento registrado un año atrás. De esa forma, la indigencia afecta a 114.000 individuos que viven en la Ciudad. “En el segundo trimestre de 2017 hubo incrementos interanuales en los ingresos de los hogares que, en paralelo a subas más moderadas de los precios, mejoran por segundo período consecutivo los indicadores de pobreza”, destacó el informe oficial. Por su parte, los sectores acomodados de la Ciudad de Buenos Aires representan el 14,4 por ciento de los hogares y el 11,3 por ciento de las personas en el período.

 La recuperación de los indicadores entre 2016 y 2017 no está siendo acompañada por un proceso virtuoso de recuperación del mercado de trabajo. En el segundo trimestre del año la desocupación llegó a 10,5 por ciento, repitiendo el registro de igual período del año pasado, el mayor de la serie del Indicador Laboral del ente estadístico porteño, que comienza en 2014. Asimismo, los datos dan cuenta de las diferencias geográficas: en el norte de la Ciudad alcanzó niveles de 7 por ciento y en el sur de la Capital la cifra escala hasta 16,9 por ciento.