El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, bajó su lista de candidatos a diputados nacionales de Juntos Somos Río Negro, con un argumento poco convincente para sus coprovincianos: “El rionegrino está pensando cada vez más en la discusión nacional, de Cristina Kirchner o (Mauricio) Macri, y la verdad es que entendimos que iba a ser muy difícil para nosotros poder torcer ese pensamiento”, se justificó el mandatario. Para la candidata del FpV María Emilia Soria “no hay dudas que la decisión obedece a las presiones que está ejerciendo el presidente Macri a un gobernador con un pésimo estado de su administración financiera, que necesita del auxilio del Gobierno nacional para pagar sueldos y de su aval para un endeudamiento externo de la provincia en 580 millones de dólares que van a pagar todos los rionegrinos”. “Esto confirma lo que dijimos en la campaña: Weretilneck le ofrece a Macri un diputado levantamanos para el oficialismo nacional. Ahora le despeja el camino a Cambiemos para que pelee por una de las dos bancas”, dijo Soria a PáginaI12.
Soria obtuvo en las PASO rionegrinas el 40,7 por ciento de los votos, con lo que conseguiría las dos bancas que están en disputa en la provincia y que son las que renueva el Frente para la Victoria. Cambiemos alcanzó el segundo lugar con un lejano 19,3 por ciento y el frente del gobernador, Juntos Somos Río Negro, muy cerca con un 18,7 por ciento. La baja anunciada este lunes de la fuerza provincial le abre expectativas al macrismo para pelear por una de las bancas.
“No sé cómo va a repercutir a nivel electoral, para tomar esa decisión analizamos la elección del 13 de agosto”, dijo ayer Weretilneck. “Hemos optado por concentrarnos en la gestión de gobierno y no en involucrarnos en la contienda electoral que nos quita tiempo y concentración en nuestra tarea de gobernar”, insistió para justificarse.
Cambiemos se subió rápidamente a la justificación del gobernador sobre “la polarización entre Cristina y Macri”. El diputado macrista por Río Negro Sergio Wisky sostuvo que el voto de los rionegrinos definirá con su voto entre “volver al pasado o profundizar el cambio”. Soria, en cambio, dijo de “redoblaremos los esfuerzos” en lo que queda de campaña y confió en que el sector peronista histórico que integra la fuerza de Weretilneck no optará por Cambiemos.
Para el kirchnerismo provincial no hay dudas que la baja de la lista del gobernador “obedece a las presiones del Presidente”. “Su administración es pésima y el resultado de las PASO son un castigo a su gestión”, sumó Soria. Otros de los motivos es el endeudamiento externo. Weretilneck apuesta a revalidar su gestión en 2019 con el Plan Castello de obras públicas para los municipios con la emisión de bonos en dólares. La ley aprobada por la legislatura provincial en mayo llega a 580 millones de dólares, aunque el permiso inicial sería de 250 o 300 millones. Claro que para eso necesita los avales del Gobierno. Una tarea para la que llegaría a Cipolletti la semana próxima el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien el lunes recibió en Casa Rosada al senador peronista rionegrino Miguel Pichetto, un rival interno de los Soria.