La Dirección Nacional de Vialidad intentará hoy que el Gobierno de Cambiemos capitalice la reinauguración del Puente Transbordador de La Boca, que conecta la ribera porteña del Riachuelo con la Isla Maciel, uno de los ocho ejemplares similares que quedan en pie a nivel mundial y que está inactivo desde hace 60 años.
Sin embargo, la buena noticia por la culminación de la obra quedó opacada por la decisión de las autoridades nacionales de no invitar al intendente de Avellaneda, el otro partido necesariamente involucrado en el emprendimiento. Es más, también circularon fotografías del retiro de los carteles de la gestión anterior, que en su momento anunciaban la restauración del transbordador.
El municipio de Avellaneda denunció que Nación y Ciudad “quieren capitalizar el evento que se realizará del lado de la Capital sin ni siquiera haber invitado formalmente al intendente de Avellaneda”.
Ante este panorama, la dirección de Cultura del municipio bonaerense organizó un festejo bajo el lema “Porque un río no es una grieta, nosotros también celebramos”, con show musicales, circo, murga y magia. También se colocaron banderas frente al lugar donde se llevará a cabo el acto de las autoridades nacionales con un mensaje de agradecimiento a la ex presidenta, Cristina Kirchner, por “haber tomado la decisión política de encarar esta obra” y otra con la pregunta: “¿Dónde está Santiago Maldonado?”.
“Nos pusieron alambres de púa y una media sombra para que no podamos pasar… Desde la Isla Maciel está cerrado al paso”, contó a Página/12 el padre Francisco “Paco” Olivera. “Quieren apropiarse de un festejo que debería involucrar a los habitantes de Avellaneda, y ni siquiera saben para qué van a usar el transbordador”, denunció el párroco.