Desde Santa Fe
El Frente Progresista operó en la Cámara de Diputados para postergar la convocatoria del ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro hasta después de las elecciones. El proyecto del diputado peronista Leandro Busatto para citar al funcionario y pedirle explicaciones por la detención de 51 policías, entre ellos el ex jefe de la fuerza en la provincia, Rafael Grau y el ex jefe de Asuntos Internos, Aníbal Candia, tenía preferencia para ser tratado en la sesión de ayer. Pero el bloque oficial lo frenó con un formalismo: argumentó que la comisión de Seguridad Pública que preside el socialista Oscar Pieroni "no se había reunido" y por lo tanto, tampoco pudo sacar el dictamen. "Es una vergüenza", reaccionó el autor de la iniciativa, que, ante el hecho consumado, aceptó renovar la preferencia para "dos sesiones", es decir después del 22 de octubre. "Evidentemente, la cantidad de policías presos en dos semanas y el llamado a Pullaro es un tema que incomoda al gobierno" de Miguel Lifschitz, interpretó el legislador.
Busatto había pedido el comparendo del ministro Pullaro hace dos semanas para que "informe" en el despacho del presidente de la Cámara, Antonio Bonfatti "sobre aspectos relacionados con el accionar de las fuerzas de seguridad en casos recientes". En concreto: los 51 policías presos en causas que investigan crímenes aberrantes y cajas negras, en Rosario y Santa Fe y la investigación de la fiscal María Laura Martí por irregularidades en las horas Ospe ‑como llaman a los servicios extraordinarios‑, que puso bajo la lupa a otros 40 efectivos.
Ya en el momento de presentar el proyecto, Busatto se dio cuenta que la bancada oficial no lo trataría rápido. Explicó que era "imprescindible" que el ministro de Seguridad informe a la Cámara la "situación" de la Policía de Santa Fe y descartó un interés secundario. "Si el gobierno cree que esto tiene un cariz electoral, se equivoca o toma el tema con liviandad. No es así. El ministro tendría que haberse ofrecido voluntariamente a venir a la Legislatura. Y si su decisión política es avanzar contra la corrupción policial va a tener todo nuestro respaldo", planteó.
El debate se zanjó con un acuerdo: se votó una "preferencia" para tratar el proyecto en "una sesión" que fue la de ayer, pero con despachos de las comisiones de Seguridad y de Asuntos Constitucionales. Así que a la tarde, en el recinto, quedó a la vista el freno político: la comisión de Pieroni que "en su mayoría está integrada por legisladores del oficialismo no se reunió y por lo tanto, tampoco dictaminó", dijo Busatto.
La falta de dictamen "es un argumento formal". "Pero mientras tanto, las situaciones se suceden en la provincia, se generan procesos de impunidad y el ministro: 'bien, gracias'", agregó.
Ayer, se renovó acuerdo y la "preferencia" para discutir si la Cámara cita -o no‑ a Pullaro, pero recién dentro de "dos sesiones", que será después de las elecciones del 22 de octubre. "Ese era el objetivo del Frente Progresista, sacar la convocatoria al ministro de Seguridad de la agenda legislativa y de la campaña electoral. Está claro", dijo.
La comisión de Seguridad está integrada por cuatro diputados del oficialismo: los socialistas Pieroni (que la preside) y Rubén Galassi y los radicales Fabián Palo Oliver y Victoria Tejeda y tres de la oposición: dos del PRO: Raúl Fernández y Alejandra Vucasovich y un solo peronista, Roberto Mirabella, que es el vice.