Los pequeños productores de verdura volverán mañana a Plaza de Mayo para denunciar que el Gobierno no atiende las demandas de este sector del campo, que a pesar de abastecer el mercado interno trabaja y vive en condiciones de extrema precariedad. Esta vez, los pequeños productores realizarán un “feriazo” frente a la Casa Rosada, donde venderán 20 mil kilos de verdura al precio de quinta. Uno de los objetivos del reclamo es visibilizar lo poco que les pagan a los productores por la mercadería en contraste con el valor con el que llega a la verdulería.
“Somos quienes producimos más del 65 por ciento de los alimentos que comemos día a día en nuestras casas. Producimos verduras, yerba, carne, leche, frutas, quesos, huevos. A pesar de la dignidad de nuestro trabajo, las condiciones en las que vivimos, producimos y comercializamos son muy precarias”, denunciaron los pequeños productores en la convocatoria a la protesta de mañana.
Para los pequeños productores, las políticas del Gobierno “favorecen al sector de campo más concentrado”. “No somos el campo rico que produce commodities para la exportación. No especulamos con nuestra producción, ni guardamos alimento en silos para vender cuando mejor se pague”, afirmaron en un comunicado, y volvieron a denunciar que el Ministerio de Agroindustria no tomó en el último año y medio de gestión “ni una sola medida que favorezca al campo pobre que produce alimentos para el pueblo”.
El feriazo convocado para este martes tiene dos objetivos: mostrar el precio que le pagan a los productores por las frutas y verduras y visibilizar la diferencia del precio con el que esos productos llegan hasta el consumidor. Mañana quienes se acerquen a Plaza de Mayo podrán comprar el atado de acelga a $4, el kilo de lechuga a $7, el kilo de morrón a $20, el kilo de tomate a $16, el atado de rúcula a $1,50, el kilo de cebolla a $4 y el kilo de zanahoria a $3.
“Desde principios del 2016 el Gobierno ha dejado a la Secretaria de Agricultura Familiar paralizada, sin presupuesto y sin políticas públicas para los campesinos, pequeños productores y la agricultura familiar. Esto es una clara definición de la política del Ministro de Agroindustria que ningunea una y otra vez al sector”, se quejaron los trabajadores de la tierra.
En septiembre, a su vez, el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, recortó un programa histórico que brinda asistencia técnica a medianos y pequeños productores y excluyó del beneficio a los productores que no sean “nacidos en territorio argentino o hijos de ciudadanos nativos”, algo que dejó afuera a más del 80 por ciento de los productores, en su mayoría bolivianos.