Sergio Palazzo eligió el Gran Rex para reasumir la conducción de la Asociación Bancaria. Pero no se trató de un lugar para diferenciarse de las tradiciones sindicales porque el bombo y los bronces que acompañaron los cánticos también estuvieron presentes. Ante una multitud reivindicó la fortaleza de su gremio, resaltó el grado de unidad que vive la CGT y advirtió que “el ataque del gobierno al movimiento obrero no es un hecho aislado y lo utiliza para avanzar en la reforma laboral que buscará imponer luego de las elecciones”.
Poco antes del acto, el dirigente gremial aseguró que “este gobierno hace mientras lo dejen hacer y el movimiento obrero unido puede ponerle un freno”. Palazzo indicó que la estrategia del presidente Mauricio Macri es clara y precisa: “Comenzó con el ataque a las supuestas mafias en el fuero laboral, luego habló de mafias entre los abogados laboralistas, más tarde intervino sindicatos y ahora desprestigia a los dirigentes sindicales. Todo lo hace para generar un escenario proclive a la reforma laboral que favorezca a los empresarios, que son de su clase”, dijo.
El acto comenzó con Jairo, tan radical como Palazzo, cantando el Himno Nacional. Pero unos minutos antes, el dirigente banacario aseguró ante un grupo de periodistas que la reunión del Comité Central Confederal sirvió “para unificar al movimiento obrero porque a pesar de las diferencias y matices internos no hubo ningún discurso que pueda ser considerado a favor del gobierno”. Incluso dijo que los límites del sindicalismo están claros y consideró que el diálogo iniciado debe dar frutos antes de las elecciones del próximo 22 y, en caso contrario, es preciso “avanzar hacia un paro” porque entiende que un resultado favorable en los comicios “envalentonará al presidente”.
Palazzo, que asume su segundo mandato al frente de la organización gremial, señaló que la medida de fuerza debe ser más que considerada porque “no podemos prever que las políticas laborales que quiere implementar el Gobierno sean buenas. Si así fueran las habrían presentado antes de las elecciones para ganar más votos”.
El bancario no esquivó las detenciones de dirigentes sindicales y en ese sentido señaló que “los dirigentes deben dar cuenta ante la justicia de su patrimonio y accionar. Pero el Ejecutivo utiliza de forma obscena el caso (Juan Pablo ‘Pata’) Medina pero también debería explicar de manera responsable el caso de Santiago Maldonado”.
Durante el acto, Palazzo avisó que estaba acompañado por “amigos y compañeros” del sindicalismo. Nombró a Hugo Yasky, Vanesa Siley, Roberto Baradel, Walter Correa, Leopoldo Moreau y Pablo Moyano. El propio Palazzo reconoció que mantiene una alianza estratégica con el camionero “para enfrentar los avances del gobierno contra los trabajadores”.
Ante sus afiliados, Palazzo les pidió que reflexionen antes de votar el próximo 22, que recuerden que el actual gobierno responde a los intereses de los empresarios y, por lo tanto, los convocó a “unirse para luchar contra este modelo que ataca los derechos de los trabajadores”. Al final del acto no hubo marcha peronista pero si reivindicaciones a Alfonsín, Perón, Evita, Néstor y Cristina Kirchner.