El jefe de Gabinete, Marcos Peña, se plantó en el recinto de la Cámara de Diputados en modo de campaña electoral. En unos pocos minutos ajustó su informe de gestión del Gobierno nacional al aumento de la “inversión” en ayuda social volcado en el presupuesto 2018, ponderó la “baja significativa” de “tres puntos” en el índice de pobreza que mide el Indec –evitando otros datos como el aumento de la indigencia–, la expansión de la Asignación Universal por Hijo (AUH) a los monotributistas y los jubilados “beneficiados” por la bautizada “reparación histórica”. También eligió con quien confrontar: “Se puede quedar tranquilo diputado que el pueblo tiene muy claro qué se va a votar el 22 de octubre”, le contestó Peña al jefe del bloque del Frente para la Victoria (FpV-PJ), Héctor Recalde, quien le reclamó que blanqueara antes de las elecciones los proyectos sobre flexibilización laboral y reformas al régimen previsional, que el ministro negó a pesar de los reconocimientos oficiales. “Estoy orgulloso de nuestra ministra de Seguridad” y de “las fuerzas de seguridad que luchan contra el narcotráfico”, contestó el ministro cuando Juan Cabandié (FpV-PJ) le recriminó la irrupción de Gendarmería y las fuerzas de seguridad en colegios y universidades por reclamos sociales y la aparición con vida de Santiago Maldonado. Peña también trató de “mentirosos” a los diputados del Frente de Izquierda (FIT) que le endilgaron al Gobierno la “protección” de los gendarmes en el caso Maldonado y de ocultar el endeudamiento externo y el ajuste programado para después de las elecciones.
Fue un informe atípico del jefe de Gabinete. En apenas 11 minutos –como le reprocharon varios diputados opositores–, el mas verborrágico ministro del gobierno macrista se explayó sobre las “bondades” de la política oficial en materia social. Peña remarco el aumento del “76 por ciento de inversión” en el gasto social que prevé el presupuesto 2018; así como el “dato positivo de la reducción de la pobreza, desde que empezamos a medirlo hace un año” que pasó de “32,2 puntos a 28,6”. “Hay una baja significativa de tres puntos”, agregó.
“Se logró por una combinación de factores, como la reactivación económica, el crecimiento del empleo, la baja de la inflación, aumento del 30 por ciento del salario mínimo, expansión de asignaciones familiares, y la ‘reparación histórica’”, dijo sobre la reducción de la pobreza, eludiendo el aumento de la indigencia.
Aunque lo consideró un hito en la declamación de “pobreza cero”, el slogan de la campaña presidencial de Mauricio Macri. “Es un objetivo que nos tiene que unir a los argentinos y poder definir como una prioridad”, sostuvo Peña en referencia a la promesa de Macri.
En el recinto casi desierto resaltaban las ausencias de las principales espadas parlamentarias del oficialismo, como el jefe del interbloque de Cambiemos, el radical Mario Negri y la socia y candidata Elisa Carrió. Los bloques del Peronismo para la Victoria-Movimiento Evita y Libres del Sur pegaron el faltazo en disconformidad con la postergación del oficialismo en el tratamiento de leyes como la prórroga de la Ley 26.160 que declara la Emergencia Territorial Indígena (con media sanción del Senado por 4 años) y la Emergencia Alimentaria que impulsan los movimientos sociales. Tampoco fueron de la partida los candidatos bonaerenses de 1País, Sergio Massa y Margarita Stolbizer.
Confrontación
A la hora de las preguntas, Recalde (FpV-PJ) reclamó “información” sobre as reformas que el Gobierno quiere implementar en materia previsional, laboral e impositiva “para que la ciudadanía esté informada”. “Esto debe estar manifiestamente siendo analizado en distintos ministerios, deben tener elaborado algo”, continuó Recalde y reiteró su reclamo de contar con “líneas de acción concretas para que podamos discutir antes del 22 de octubre, para que el pueblo sepa qué va a votar, más allá de que después puedan mentir”.
Puesto en modo electoral, Peña no dudó en replicar. “Se puede quedar tranquilo diputado que el pueblo tiene muy claro qué se va a votar el 22 de octubre, tiene muy claro los valores, las ideas y la conducta de cada fuerza política”, sostuvo el ministro que negó que haya “ningún proyecto oculto” para después de las elecciones, al tiempo que sostuvo que cualquier iniciativa se va a tratar en el Congreso. “Si quieren discutir lo discutimos en las urnas”, desafió al kirchnerismo.
También confrontó con Cabandié. “Estoy orgulloso de nuestra ministra de Seguridad por el trabajo y el liderazgo que ha tenido en el combate al narcotráfico”, enfatizó Peña desviando la pregunta del diputado porteño del FpV-PJ, que le cuestionó las incursiones de las fuerzas de seguridad en escuelas y universidades de todo el país. También dijo sentir “orgullo” por que “las fuerzas de seguridad estén liderando el combate al narcotráfico que ustedes (por el kirchnerismo) no realizaron”. “Muchos hombres que se juegan la vida por la democracia, la Constitución y las leyes”, completó Peña quedándose con la última palabra. Lo que mereció la réplica de Cabandié (ver aparte).
“Como hemos repetido permanentemente nos interesa principalmente como Gobierno la aparición con vida y el esclarecimiento de todo lo que ha ocurrido. Y hemos sido muy claros que no habrá ni encubrimiento, ni ningún otra cuestión que apañe a una persona que haya hecho algo mal”, contestó Peña –repitiendo el relato oficial– ante el cuestionamiento del fueguino Oscar Martínez sobre la desaparición forzada de Maldonado y de si “¿van a dar la respuesta a la movilización popular y el reclamo en todos los puntos del país que piden la renuncia de los funcionarios del Ministerio de Seguridad o van a seguir haciendo oídos sordos?”.
El ministro buscó minimizar las críticas a la creación de una fundación paralela en el PAMI y al decreto presidencial que creó una sociedad anónima en el ámbito de Vialidad Nacional. Contrapuso los números oficiales para intentar apaciguar los cuestionamientos de la oposición amigable sobre las subejecuciones en obras pautadas en el presupuesto 2017 y la baja de capital per cápita en obras previstas para las provincias en 2018. En más de una oportunidad, Peña remarcó que el oficialismo es “minoría” en el Congreso, como un llamado a respaldar con el voto al gobierno en las elecciones del 22 de este mes.
Sobre el final, Peña confrontó con la izquierda. “Marcos Peña vino nuevamente al Congreso a hacer campaña electoral. Dice que hacen todo lo posible por encontrar a Santiago Maldonado pero ni siquiera lo mencionó en su informe. No hay ningún gendarme imputado a pesar de las pruebas que hay. Tampoco habló del brutal endeudamiento de 359.000 millones de dólares que reconoció por escrito, ni de los convenios laborales a la baja o la heroica lucha del pueblo catalán contra Rajoy y la monarquía”, dijo Juan Carlos Giordano (FIT-IS). “Son falsedades”, contestó el ministro para cerrar su informe de gestión en modo electoral.