La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau condenó la represión ordenada por el gobierno de Mariano Rajoy en Catalunya, por parte de la policía y la guardia civil, el 1º de octubre para impedir un referéndum sobre la autonomía catalana. Colau denunció violencia sexual contra las electoras por parte de las fuerzas de seguridad. A una mujer le rompieron los dedos de la mano, uno por uno y un agente le manoseo los pechos mientras se reía. El ex vicepresidente del Parlamento Vasco, Gorka Knorr, también denunció en Twitter: “A una amiga la Policía Nacional le dio una paliza al grito de ‘no me gustan tus tetas’”.