El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo ayer que se están investigando los graves y confusos episodios en el municipio de Tumaco, en una erradicación de plantaciones de coca, donde afirmó que hay seis muertos y 19 heridos, que negó que hubiesen sido abatidos por la policía, como afirmaron organizaciones campesinas y sociales, que hablan de ocho muertos y 52 heridos. En la mañana de ayer Santos se reunió en la sede del gobierno con la cúpula militar y de Policía; el vicepresidente, general Óscar Naranjo; el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, y el consejero para el Posconflicto, Rafael Pardo, con el fin de analizar los ocurrido en Tumaco, departamento de Nariño.
Durante ese encuentro, según el diario bogotano El Espectador, se indagó por qué ningún uniformado resultó herido, mientras que la población civil sí se vio afectada, ya que los muertos son campesinos. “La versión que me dieron es que cuando comenzó la situación, se replegaron los miembros de la fuerza pública y como están acostumbrados a esos hechos, se atrincheraron y respondieron el fuego. Entonces, estaban protegidos”, dijo Santos, quien envió ayer mismo a Tumaco al vicepresidente y ex jefe policial Naranjo
“Hay bandas criminales y organizaciones dedicadas al narcotráfico que están haciendo todo lo posible para que no prospere la política de erradicación forzosa o sustitución voluntaria”, agregó Santos. De hecho, el presidente dijo que aparentemente dos miembros de la disidencia de las FARC, identificados con los alias “David” y “Guacho”, serían los responsables de los hechos de ayer jueves en Nariño y los directamente responsables de los disparos.
Por su parte, Rodolfo Londoño, ex jefe guerrillero y actual jefe del partido político FARC (Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común) sostuvo por Twitter que “todo el peso de la ley debe caer sobre los culpables de la masacre en Tumaco”, y aseguró que los medios tergiversan la verdad: “campesinos en Tumaco hacen resistencia a erradicación forzada de cultivos de uso ilícito (y no acordada o voluntaria, como se estableció en los acuerdos de paz). Es urgente misión de verificación en Tumaco, que identifique con veracidad los responsables de masacre a campesinos movilizados”, concluyó Londoño, más conocido por su alias de guerra, Timochenko.
En tanto, Jean Arnault, jefe de la Misión de la ONU en Colombia, mostró su esperanza de que la muerte de los cocaleros “contribuya a que el país se una en torno” a la búsqueda de una solución para que los campesinos no sean “víctimas de la encrucijada” en la que considera que viven entre “la pobreza y la ilegalildad”.
En un comunicado emitido ayer, el Ejército y la Policía dijeron que cuatro civiles murieron y otros 14 fueron heridos en el ataque, ocurrido en el caserío de Puerto Rico, cuando disidentes de las FARC lanzaron explosivos y dispararon contra miembros de la fuerza pública, que escoltaban a erradicadores de matas de coca, y contra una multitud congregada en el lugar para protestar contra esa labor. Sin embargo, el ministro de Defensa, Villegas, aseguró ayer que fueron cinco los campesinos muertos en un ataque en el suroeste del país contra cultivadores de coca y reiteró que la acción fue perpetrada por disidencias de las FARC. Y luego Santos habló de seis muertos.
La cifra contradice las del movimiento social Marcha Patriótica que aseguró hoy en una rueda de prensa que los fallecidos ayer son 8 y 52 los heridos, por los que responsabilizan “al Estado colombiano”. El vocero de Marcha Patriótica, David Flórez, leyó un comunicado que afirma que el ataque ocurrió en el caserío de Tandil y que fueron integrantes de la policía quienes “amenazaron y dispararon de forma indiscriminada sus armas de dotación en contra de la multitud que se encontraba en el lugar”.
Según dijo, en el lugar estaban “cerca de 1.000 campesinos en desarrollo de una acción cívica de ‘cerco humanitario’” contra policías y militares que llevaban a cabo “una acción de erradicación forzada de cultivos de uso ilícito”.
El jefe de la cartera de Defensa sostuvo que “no es posible que coarten la libertad de la gente forzándola a hacer una supuesta protesta, y después la asesinen”, dijo Villegas en diálogo con el Canal Institucional y con Radio Nacional. Villegas aseguró que las personas afectadas fueron atendidas y trasladadas por las Fuerzas Armadas hasta Tumaco, en donde están las autoridades para hacer las investigaciones.
Igualmente explicó que los hombres que perpetraron el ataque son liderados por alias “Guacho”, de quien dijo que es “un ciudadano ecuatoriano que se ha dedicado a cuidar sus cultivos de varios miles de hectáreas en la frontera con Ecuador, de los cuales deriva sus ingresos ilícitos”.
“Esta banda será perseguida con toda la contundencia del Estado”, aseguró.
Villegas agregó que ayer recibió un mensaje de la Cancillería ecuatoriana “quienes por su cercanía con la frontera inmediatamente detectaron los ataques con ‘tatucos’ (explosivos) y ametralladoras, y enviaron su mensaje de solidaridad para las víctimas y sus familias, y también para nuestra fuerza pública”.
Detalló que ese grupo disidente de las FARC “se ha dedicado a forzar a la gente, les ayuda a cuidar los cultivos y también a protestar cuando llega la fuerza pública, como sucedió ayer”.