Entre el puñado de personas que se acercó a la Quinta de Olivos para saludar a Javier Milei estaba el líder de Revolución Federal, Jonathan Morel, procesado por incitación a la violencia colectiva a raíz de una serie de agresiones contra dirigentes del oficialismo que, según sospecha la defensa de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, habrían derivado en el atentado contra su persona. Para sorpresa de nadie, Morel manifestó su apoyo al líder libertario y reconoció que se mantiene alejado de La Libertad Avanza para no "ensuciar" al espacio. Además, afirmó que "Caputo solo es un cliente" y no el financista del grupo que llevó guillotinas y antorchas a sus manifestaciones.

De acuerdo con declaraciones a radio Splendid, el líder del grupo de ultraderecha que emprendió acciones de intimidación y amenazas contra referentes del actual gobierno pasó por la quinta presidencial para saludar al mandatario electo. "Soy vecino de Vicente López, asi que me queda cerca, me acerco para mostrarle mi apoyo a Javier Milei", dijo Morel. Adentro, Milei discutía con el mandatario saliente, Alberto Fernández, los detalles de la transición. Tras la reunión, varios de los simpatizantes que aguardaban sobre la avenida Maipú intentaron sin éxito obtener una foto con Milei, que se alejó en su auto.

"Me alegra que el oficialismo haya perdido y que el pueblo decidió elegir el cambio", sostuvo Morel y aseguró, en relación a su situación procesal y las acusaciones en su contra, que "cuando pasa lo de Cristina (Kirchner), Agustín Rossi presenta un audio mío donde yo digo que la veía a Cristina desprotegida, que si no me conocieran me infiltraría, y que cuando pueda paso a la historia. Pero pasar a la historia puede ser gritarle chorra o corrupta y pasas a la historia igual, no hace falta asesinar a nadie". 

Lo cierto es que el líder de RF protagonizó muchos episodios de violencia durante los meses previos al intento de magnicidio contra la vicepresidenta: insultos, amenazas, escupitajos y otras agresiones contra dirigentes ligados al oficialismo, como las legisladoras Claudia Neira y Maia Daer; el intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi o la extitular del INADI VIctoria Donda. En Twitter Spaces el grupo daba rienda suelta a sus fantasías y consideraba distintas formas de matar al adversario político. Allí Morel dijo que le hubiera gustado meterse entre los militantes que iban a apoyar a CFK, cantar la marcha peronista como uno más y hacerla "pasar a la historia", lo que terminó intentando Fernando Sabag Montiel.

Por el momento, la Justicia investiga de forma separada el intento de asesinato y las acciones de RF, aunque Brenda Uliarte, una de las detenidas por el fallido magnicidio, vinculó a Sabag Montiel con los integrantes del grupo de extrema derecha. También queda por dilucidarse el origen del financiamiento del grupo, que parece apuntar directamente a la familia Caputo. Supuestamente, la empresa Caputo Hermanos habría contratado a Morel, dueño de una modesta carpintería de Boulogne por una suma millonaria para un trabajo en la localidad neuquina de Añelo. Pagos que iniciaron un día antes de la primera marcha de antorchas de la organización, y se cortaron con el intento de asesinato a CFK.

"No han podido comprobar nada, la figura penal siguió cayendo, ahora estoy esperando el sobreseimiento. El kirchnerismo quiso utilizar a un cliente mío de la carpintería como es Caputo, me contratan, paso un presupuesto y hago el trabajo, cuando se enteran arman todo usando el apellido de él que no tiene nada que ver con esto, pobre", se defendió Morel. En esa línea, se mostró convencido de seguir por el mismo camino que lo llevo a enfrentar un procesamiento de la Justicia por incitación a la violencia, sin realizar una autocrítica por hacer marchas con antorchas y guillotinas. "No estoy arrepentido de nada, era una persona desesperada para que alguien escuche y poder visibilizar al pueblo callado. Lamentablemente, los políticos argentinos necesitaron que un pibe arme una guillotina y la lleve a la 9 de julio para ver qué pasaba". Y se desligó de vinculaciones con LLA, al menos en el futuro inmediato: "Intento mantenerme lo más alejado posible porque no quiero que ensucien este partido que es tan noble y con gente tan buena, por lo menos hasta que no esté todo aclarado en la Justicia, solo apoyo".