El ex juez de la Corte Suprema consideró que “hay un montaje de un espectáculo judicial que coincide con las elecciones” y que el clima político remite al 55. Opiniones sobre el caso Maldonado y la detención de Milagro Sala.
Para Eugenio Raúl Zafaroni, el gobierno de Mauricio Macri “manipula a la Justicia” de una manera tal que “las palabras no pueden disimular nada”. Así se refirió al opinar sobre el panorama actual, en el que “el presidente dice que precisa jueces propios, persiguen a jueces y camaristas y tratan al fuero laboral de mafioso”, y que lleva a que “hoy en la Argentina tenemos un estado de derecho muy deteriorado”.
Por FM La Patriada, consideró que en el país “se destruye lo que se construyó con mucho esfuerzo” en relación al fallo de la Corte Supremo que desconoció la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. “No me quejo porque yo integre la Corte” que se desconoció en la sentencia “sino porque nos deja fuera del sistema interamericano de derechos humanos, hay fallos que son regresivos”.
Zaffaroni caracterizó al gobierno como una forma de “revanchismo análogo al 55, con odio”. Dijo que “la brecha la abren ellos con el monopolio de los medios y el apoyo de buena parte del poder judicial”. Y que “tenemos un montaje de un espectáculo judicial que coincide con las elecciones”.
En tal sentido opinó sobre la prisión de Milagro Sala en Jujuy y el desconocimiento de su arresto domiciliario, un reclamo internacional. “Es obvio que lo que se hizo con ella no fue prisión domiciliaria, sino un cambio de prisión”. Consideró que “se perdió todo pudor, ahora hacen aberraciones desembozadamente” y opinó que “corresponde que haya una intervención judicial al Poder Judicial de Jujuy”.
El juez también habló sobre la desaparición de Santiago Maldonado, y manifestó que “confío en este nuevo juez, (Gustavo) Lleral hace las cosas de forma correcta”. Fustigó la actuación del anterior juez, Guido Otranto, porque “violó un principio importante, no sacó a la Gendarmería de la investigación, algo fundamental cuando se sospecha de una fuerza de seguridad”.
También analizó el trasfondo político del caso y dijo que en el gobierno “están entre la espada y la pared”, porque si se produce la renuncia de Patricia Bullrich “eso sería visto como un signo de debilidad para su grupo duro de opinión”, mientras que “se tienen que dar cuenta de los errores graves que hubo en ese ministerio”. No dudó en decir que “hay maniobra de encubrimiento” desde el momento en que “comenzamos a sospechar de una desaparición forzada cuando en el gobierno la negaron”. Y afirmó que “confío que se sepa lo qué pasó” con Maldonado “por más que se complica saber la verdad cuanto más pasa el tiempo”, no obstante lo cual “espero que alguien se quiebre y hable”.
Finalmente, planteó su mirada sobre el futuro inmediato, en el que ve a Cambiemos como “un proyecto económico que se vio cómo funcionaba con (Domingo) Cavallo y (José Alfredo) Martínez de Hoz y sabemos cómo termina”. En su opinión, “después de las elecciones habrá aumentos de tarifas, despidos de empleados públicos y meterán mano en la Anses”. De cara a los que se viene sugirió: “No hay que deprimirse como si esto no tuviera solución. Hemos superado cosas más difíciles, y con depresión no se resiste”.