“Pensé que era mi mamá”.    Es de mañana en Berlín, y Liam Gallagher acaba de recibir el teléfono de manos de su novia y manager Debbie Gwyther, quien aparentemente pensó que en la línea estaba su madre y no una periodista. No parece importarle demasiado que sea esto último: el ex frontman de Oasis es paciente, por momentos histéricamente divertido, y está feliz de contestar cualquier pregunta que se le plantee en veinte minutos de conversación. En la semana de lanzamiento de su disco debut como solista –el primero en una carrera que abarca treinta años–, no parece ni nervioso ni demasiado confiado. “Definitivamente, es el disco más honesto que haya sacado; tiene sus buenos momentos”, dice. “Es lo que es”.

Producido por Greg Kurstin y Dan Grech-Marguerat, As You Were es un Liam clásico: fanfarrón, sin ánimo de pedir disculpas. Rock and roll al viejo estilo. “No conocía a Kurstin ni a Andrew (Wyatt, coescritor de canciones), con lo que nos juntamos a tomar una taza de té. Les dije el tipo de cosas que estaba buscando hacer, y entonces me tocaron el riff de ‘Wall of Glass’. Eso fue escrito y grabado en un solo día... realmente todo encajó, no tuve tiempo para detenerme a repensar las cosas. Cuando pasás demasiado tiempo trabajando en algo, pensando y repensándolo, te volvés demasiado analítico. Y personalmente creo que de eso se trata el rock and roll propiamente dicho: la música de guitarras no está allí para ser estudiada. Yo necesitaba volver con un buen disco lleno de buenas canciones, sin estupideces”. A Gallagher le gusta tocar “Greedy Soul”, especialmente en sus shows en vivo: “Tiene poder y energía, es agresivo, tiene una buena vibra. Es como comer un vindaloo, un curry bien picante”, dice. “Cuando lo estás cantando te ponés a sudar. Es eso, estar comiendo un plato muy picante y te das cuenta que es una locura comerse eso, pero está tan bueno que te hace sudar hasta las tetas”.

Liam tiene claro que algunos periodistas –y algunos fans también– podrán decir que el disco “no es lo mismo” sin Noel a bordo para las tareas de composición. Pero cualquier hueco que pueda producir la ausencia del hermano mayor ha sido cubierta en el disco con una serie de colaboraciones muy inteligentes, que hace que suene más “a lo Oasis” que cualquier cosa que él haya sacado desde la separación de la banda en 2009. “La co-escritura... no es algo que me afecte demasiado”, dice Liam. “Ha abierto todo un nuevo universo para mí. Soy el primero en admitir que no soy el mejor compositor del mundo pero me estoy acercando, ¿se entiende? Pasé veinte años siendo el fucking tipo de la banda. Pero en cuanto meto mi voz es... bingo”.

Durante el verano inglés, Liam fue omnipresente: fue el artista principal de casi todos los festivales grandes del Reino Unido y Europa, actuó en cadenas nacionales de televisión de Inglaterra y Estados Unidos y anunció una gira de presentación del álbum que comenzará a fines de este mes. “La gente se aburrirá de esto”, dice. “Si no están aburridos de mí ahora, se aburrirán muy pronto. Con lo que sacaré el disco y se lo meteré a la gente por la garganta. Lo estoy disfrutando, y voy a hacer la mayor cantidad de shows que pueda”. Liam está saliendo a la ruta al mismo tiempo que Noel gira con sus High Flying Birds, una banda que Liam desdeñó como “Beady Lite” (Beady “liviano”), en referencia a su ex banda Beady Eye. Aunque aún no es claro sobre cuánto costarán los tickets, fue muy veloz en criticar a su hermano por fijar sus precios en 330 dólares por su paquete de “experiencia aumentada” para los shows. El 29 de septiembre dejó caer varios tuits al respecto: “350 dólares para ver al pibe en USA, qué tarado, cuándo se terminará esto”; “Trescientos cincuenta putos dólares para ver a Beady Lite, tendrían que hacerse revisar la cabeza”; “¿Qué es esa fucking experiencia aumentada? Suena como una sala de masajes, sabés lo que quiero decir? Vení a ver a Noel Gallagher, una experiencia aumentada, qué fucking infierno”. Con otro ánimo, Liam tuiteó recientemente que había hecho las paces con el actor Idris Elba, luego de una pelea porque él se había sentido “ofendido” por el sombrero que Elba usó en los premios NME de 2013. Liam sostuvo que Elba le había tirado del pelo; elba dijo que Liam le había quitado el sombrero. Más allá de quién había comenzado el asunto, el post en Twitter sugería que todo había quedado en el pasado. “No soy de guardar rencores”, dice. “Me enojó mucho la separación de Oasis, pero no guardo rencor. Esa noche de los premios había bebido mucho y no sabía quién era Idris. Pero después nos encontramos en Ibiza y tuvimos una charla, nos encontramos en los premios GQ este año y tuvimos otra conversación, después lo vi en (el programa televisivo) Graham Norton y él estaba muy bien. Ya nos dimos la mano”. Y agrega con una risa: “Pero él nunca se disculpó, yo solo estaba bromeando”.

A pesar de todo, Liam admite que aparecer en Graham Norton no fue la experiencia más cómoda. También tuiteó una disculpa por ser “un pequeño idiota esquemático”, y admitió no estar hecho para la conversación frívola de estudio de TV. “Siempre me pareció algo extraño ese lado de las cosas. Creo que me he vuelto demasiado maniático, prefiero solo ir y cantar mi canción”, dice. “Pero tuvimos una charla, Graham es un buen tipo, no me estaba haciendo preguntas estúpidas. Simplemente no puedo manejar el lado algo tonto de todo eso”, explica. “Por eso era bueno estar con Noel, porque él ama hacer esa clase de cosas. Yo cantaba las canciones y él se instalaba en el sofá y podía estar días con la cháchara; ese era el buen balance de Oasis. Pero ahora tengo que hacer un poco de esa clase de cosas, y probablemente tenga que entrenarme en el manejo con los medios”. 

Es casi desconcertante, entrañable, el modo en que Liam pasa rápidamente de llamar a Noel “un idiota” a desearle lo mejor con el nuevo disco de High Flying Birds, Who Built The Moon? En los momentos de la entrevista que invierte en hablar de Noel, suena bastante como si extrañara a su hermano mayor. “El tiene que hacer lo suyo, yo tengo que hacer lo mío. El está sacando un disco, y estoy seguro que va a ser muy bueno”, dice. “Noel es un buen compositor, lo he dicho millones de veces antes. No tengo un enfrentamiento con él, solo le hago saber que estoy aquí. Yo lo ayudé a él y todos sus amigotes a estar donde están, tanto como él me ayudó a mí. El pensó ‘Liam no va a volver nunca, no estará en una banda, ciertamente no co–compondrá más’, pero yo lo hice. Y ahora tengo un álbum decente y probablemente él esté pensando ‘mierda, volvió a la fucking arena’. Y yo se lo hice saber. La gente piensa que yo estoy fuera de servicio, ¿y qué? Yo hago lo que hago, vos hacés lo que hacés”.

Si se le pregunta de improviso a cualquier integrante de banda de rock, indie o pospunk del Reino Unido cuál es el más icónico frontman del rock que se les ocurre, es muy probable que la primera chance sea Liam. Cuando se le dice eso él suena halagado, aunque señala que él es “uno de ellos”, y que no tiene el mismo estilo de vida que hace quince años, incluso cinco. Se ha calmado. “Hago exactamente lo que dice el envase. Todos mis héroes son así... Keith Richards, los tipos como él, ¿se entiende? Nunca me interesó Morrissey. A Noel le gusta. Pero ahora tengo 45 años, y la noche después del show simplemente me voy a la cama. Uno tiende a pensar que es invencible, pero a veces no podés salir aunque tengas ganas de hacerlo”. También suena inseguro sobre si hay alguna banda nueva allá afuera que pueda tomar ese rol. “Hoy en día, las bandas se petrifican ante la posibilidad de salirse de la línea, de decir algo controversial”, suelta y se lanza a otro discurso acalorado, esta vez dirigido a los frontmen de la escena musical actual que se preocupan demasiado por cómo lucen. “Escucho una banda y pienso ‘OK, están bien’, y después veo que el frontman tiene unos zapatos puntiagudos, y tacos altos, y una permanente en el pelo y un chaleco. Andate a la mierda”.

A pesar de todos los rumores, todas los artículos con “versiones de fuentes cercanas” y las propias admisiones de Liam de que le gustaría que sucediera, una reunión de Oasis no está en los planes inmediatos. “Prefiero estar en una banda, y nosotros nunca deberíamos habernos separado, pero ciertamente no estoy desesperado por una reunión. Lo estuve, lo necesité hace unos cuatro años, pero ciertamente ahora no lo necesito. Prefiero estar en una banda, una que hace que el mismo tipo de ruido que Oasis. Sí, extraño estar en una banda con mi hermano. Pero ahora eso no sucede”. Sobre los constantes rumores al respecto, reflexiona: “Sucede todos los años, ¿no? Tenemos que tener una buena y larga charla sobre qué significa cada cosa. Un montón de gente siente que tiene propiedad para hablar sobre nosotros, pero la razón por la que soy así es porque me pincharon demasiado. Incluso cuando estábamos en Oasis, podía salir de las entrevistas y ese idiota empezaba a criticarme. Entraba a hacer otra entrevista y el periodista me decía ‘mierda, no le gustás a tu hermano, ¿no?. Qué me importa si Noel la pasa mal. Simplemente le hago saber a la gente lo idiota que es”.

En la entrevista de tapa de la edición de noviembre 2016 de la revista Q, Dave Gahan, cantante de Depeche Mode, sugiere que la relación de Liam con su hermano mayor es muy parecida a la que él tiene con el guitarrista Martin Gore, y que deberían hacer las paces por el bien de su banda. “Yo amo a mi hermano”, sostiene Liam. “Pero amo al tipo con el que acostumbraba compartir todo en una banda, lo adoro. Ahora es como el señor sonrisas, el señor jodidamente feliz, y yo solo lo veo y me dan ganas de mandarlo a la mierda, no es el hermano que yo conozco. Pero el que estaba conmigo en un grupo, tomándonos unas cervezas y riéndonos, ese sin dudas es el hermano al que adoro. Sucede que a veces la gente cambia. Algunos para bien, y algunos para mal”.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para PáginaI12.

Este año, Liam encabezó varios festivales europeos.