El gobierno provincial otorgó ayer un subsidio de 18 mil pesos a los 117 trabajadores que emplean 19 fábricas de calzado en Acebal, atravesadas por una severa crisis como consecuencia de caída en las ventas, la apertura de las importaciones, y la venta informal. Además, se puso a disposición de la comuna un crédito de un millón de pesos para destinarlos a las empresas más pequeñas y a los talleres familiares que producen para las industrias del sector. "Es una ayuda para los trabajadores y un alivio para los empresarios", destacó el ministro de la Producción, Luis Contigiani (foto), al encabezar el acto de la entrega de aportes, acompañado por el senador Miguel Cappiello y el jefe comunal Daniel Siliano. "Nunca escuché al gobierno nacional salir a defender la industria del calzado, siempre están con ambigüedades o hablando de reconversiones industriales, es preocupante porque no son buenas señales", criticó Contigiani. "Lo importante, como hace el gobierno de Santa Fe, es intervenir, defender el trabajo y a las empresas para no regalárselo al mercado externo", agregó el funcionario y primer candidato a diputado nacional del Frente Progresista.

Las fábricas de calzado representan el 60 por ciento de la economía de Acebal, la localidad de 6.500 habitantes del Departamento Rosario que están muy preocupados por la situación que atraviesa el sector. "Las ventas bajaron y se están terminando lo poco que se había vendido para entregar, creemos que en 15 días vamos a estar en una situación complicada", advirtió el jefe comunal.

Para graficar el panorama, Siliano explicó que una de las industrias había realizado una importante inversión para agrandar la planta y producir 800 pares de calzado por día y en la actualidad sólo producen 150 por día. Iván Heredia, titular de la fábrica de calzados Over, que emplea a 15 trabajadores, agregó que el panorama es preocupante por "la liberación de lo importado".

En ese marco, Siliano y el grupo de empresarios del calzado que estuvieron ayer en la sede de Gobernación, celebraron el aporte provincial a partir de un subsidio no reintegrable de 18 mil pesos para los trabajadores de las empresas en crisis que se abonarán en dos meses, y la entrega de un millón de pesos a la comuna para implementar el fondo rotatorio que estará destinado a los pequeños fabricantes y a los talleres familiares, que no pueden ser sujeto de crédito formal, y que producen para las 19 empresas dedicadas al calzado. El ministerio ya había entregado un crédito de cinco millones de pesos a una de las industrias para que sigan produciendo.

"Para proteger al sector, muy sensible al mercado interno y a las importaciones, hay que tener una decisión política de intervenir y de ayudar tanto en lo coyuntural como en la posibilidad de plantear estrategias de integración, y después administrar el comercio exterior", planteó Contigiani.