Colombia consiguió su clasificación directa al Mundial de Rusia con un empate 1-1 ante Perú, que jugará el repechaje ante Nueva Zelanda, en partidos de ida y vuelta que tienen fecha para el 6 y el 14 de noviembre.
La selección dirigida por José Pekerman controló el primer tiempo porque sus volantes prevalecieron sobre los locales, en un esquema que privilegió la parte defensiva. Además de ceder el control, Colombia buscó el
contragolpe vía Cuadrado, Falcao, Zapata y James Rodriguez, aunque sin generar acciones claras de gol. Por eso no extrañó que el primer tiempo terminara con el marcador en blanco.
El complemento arrancó con la misma tónica, aunque Colombia imponía la jerarquía de sus jugadores. Y en ese marco llegó la apertura del marcador: Zapata cabeceó hacia el área y Falcao fue por una pelota que finalmente le quedó a James para que definiera con frialdad y pusiera a los cafeteros más cerca de Rusia.
El técnico de Perú, Ricardo Gareca, jugó sus cartas, porque el resultado lo dejaba sin chances de viajar a Rusia. Sacrificó marca y sumó hombres en ofensiva. Tomar riesgos le dio el premio de la igualdad, en una pelota parada. El árbitro brasileño sancionó una discutida falta y Guerrero, inclinado hacia la derecha y desde unos 35 metros, sacó un remate preciso que doblegó la resistencia de Ospina. El empate aumentó la confianza en los peruanos, que fueron en busca de una victoria que hiciera realidad el sueño de volver a un Mundial después de 36 años. Sin embargo, no hubo más goles. Lo llamativo fue ver cómo con el transcurso de los minutos, se reiteraban los diálogos entre los bancos y los futbolistas buscando información sobre los resultados que se daban en los otros cotejos. En ese marco de fuerte tensión transcurrieron los segundos los siguientes minutos, hasta que Rissi marcó el final, Colombia respiró aliviada y Perú mantuvo en alto la esperanza de eliminar a una Nueva Zelanda teóricamente inferior para volver a un Mundial.