Ayer finalizó el retiro espiritual del gobierno nacional en Chapadmalal. El presidente Mauricio Macri insistió en calificar con un 8 a su primer año de gestión, pese a la alta inflación, la caída de la actividad económica, los despidos y el fuerte endeudamiento en dólares. De todas maneras, Macri aclaró que no se trata de “una evaluación científica”. Además de anticipar la presentación un informe con 100 objetivos de gobierno para el 2017, el Presidente destacó que uno de sus principales logros fue “volver a relacionarnos entre los argentinos, dialogando y diciéndonos la verdad”, y “lograr el diálogo también con el mundo”. No faltó una alusión a la herencia y la promesa de “estar listos para crecer el año que viene”. Macri rechazó las críticas del titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, y su pedido para “oxigenar el gabinete”. “Es la visión de él, pero no la comparto. Estoy contento con el equipo”, afirmó. Además, agregó que Cambiemos es “un espacio abierto” al que jamás dejará de “convocar a gente maravillosa”, pero “no se trata de amontonar, sino de coherencia, compromiso en objetivos, ética y capacidades”.
La despedida de Chapadmalal
Este artículo fue publicado originalmente el día 4 de diciembre de 2016