Una masiva movilización copó las calles de Rosario este sábado 25 de noviembre, en el marco del Día Internacional de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer. Bajo la consigna “Basta de violencias machistas, fascistas. Ni un paso atrás”, distintas agrupaciones feministas y de diversidades, junto a organizaciones sociales, sindicales y políticas marcharon desde Oroño y el río hasta las escalinatas del Parque España, donde se realizó un acto con la lectura de una proclama. La jornada tuvo como objetivo visibilizar las violencias contra las mujeres, pero también defender los derechos conquistados en los últimos años, ante un gobierno nacional electo que anticipó la eliminación del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad. “Quieren eliminar la Educación Sexual Integral, el aborto y todos los derechos que hemos logrado conquistar como colectivo en estos años”, se leyó en la proclama.

Punto de partida

La concentración tuvo lugar en la zona de los silos Davis, donde pasadas las 15  distintas agrupaciones comenzaron a organizarse para movilizar. De la actividad participaron organizaciones como la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, de Rosario; la Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres; y Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá), acompañadas por organizaciones como ATE, Siprus, el Movimiento Evita, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Polo Obrero, entre otros. Pasadas las 17, comenzaron a marchar hacia el Parque España. 

En diálogo con Rosario/12, mujeres de las distintas organizaciones compartieron su mirada sobre la jornada, en un contexto social y político particular. Silvia Augsburger, integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, de Rosario, consideró que es momento “de seguir planteando demandas” con el objetivo de tener una sociedad con igualdad de oportunidades para varones y mujeres. “Es un contexto de retrocesos en los avances, sobre todo institucionales, que habíamos logrado con el Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad en el orden nacional, y que el presidente electo lo ha tirado abajo”, cuestionó.

En una misma línea, Viviana Della Siega, reafirmó el compromiso de seguir manifestándose en las calles para evitar que haya sectores “que sufran persecución y pérdida de derechos” a partir del 10 de diciembre. “Va a ser una situación difícil, porque se plantea eliminar las instancias institucionales que hemos logrado y está en juego la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), por la que tanto luchamos desde la Campaña, en Rosario”, señaló otra de las referentes de la organización.

Foto: Sebastián Granata

En tanto, Ana Clara Bordato, integrante de la Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres de Rosario, adelantó que el escenario electoral pone en discusión derechos que se habían conquistado en las calles: “Nosotras planteamos discutir todos estos discursos de odio y todo lo que viene anticipando el nuevo gobierno que va a hacer. El punto es decirle no a los discursos de odio y seguir marcando que las mujeres atravesamos violencias en todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana”.

A su vez, Liliana Leyes, recordó que cada hora son asesinadas cinco mujeres y diversidades en todo el mundo. “Creemos que en este nuevo contexto político va a haber un retroceso, pero también una resistencia muy fuerte que en estos 40 años de democracia se fortaleció y hoy trabaja de manera articulada, como se ve en esta marcha. Esto nos muestra el camino para no retroceder y seguir resistiendo”, señaló la secretaria de Género de la CTA Santa Fe. 

Mientras que Majo Poncino, integrante del Colectivo Ni Una Menos, señaló que es un día de “lucha y conmemoración”, que sirve para denunciar y visibilizar la cantidad de femicidios, transfemicidios y travesticidios, así como también reclamar más y mejores políticas con perspectivas de género. “Nos encontramos en un momento muy complejo, pero con la convicción de que vamos a defender nuestros derechos cueste lo que cueste”, adelantó.

La proclama

Pasadas las 18, la columna comenzó a llegar a la zona de las escalinatas con un canto que hacía mención a las declaraciones negacionistas de la dictadura militar, por parte del gobierno electo: “Villarruel, pichona de Videla, acá tenés las pibas que bancamos a las abuelas”.

Sobre un escenario instalado en el playón del parque, la comisión organizadora del evento leyó la proclama elaborada por la Asamblea Lesbotransfeminista de Rosario. En el documento recordaron que se trata de una jornada especial, que encuentra a la Argentina “en uno de los tiempos más difíciles, corriendo riesgos de perdida de los derechos conquistados” en democracia. “Y con un gobierno de derecha restaurador de los peores momentos de la dictadura militar que asoló nuestro país desde el 76 al 83 con el resultado de 30.400 desaparecidos, muertes, tortura y, exilios”, remarcaron.

En ese marco, señalaron que el gobierno electo cuenta entre sus filas con personas negacionistas que “tienen a los feminismos y disidencias como enemigos a combatir” durante su gestión. “Quieren eliminar la educación sexual integral, el aborto, y todos los derechos que hemos logrado conquistar como colectivo en estos años”, expresaron y agregaron: “La violencia patriarcal, machista y fascista crecerá sin parar si no nos organizamos para resistir”.

Entre las demandas, la proclama reclamó la aplicación efectiva de la ESI en todas las escuelas, que se garantice el acceso a los dispositivos de atención en violencia, y políticas públicas con mayor presupuesto para el abordaje integral de la violencia de género. “Declaración nacional y provincial de la emergencia contra la violencia por razones de género”, remarcaron entre los distintos puntos.

“Queremos decidir sobre nuestros cuerpos, maternidades y proyectos de vida”, expresaron y agregaron: “Que la ley 27610 de aborto sea comunicada, difundida, respetada e implementada en todo el país. Ni una menos, no más presas por abortar. Queremos niñas no madres, queremos infancias libres de violencia”:

 

Por último, hubo un reconocimiento a las madres, abuelas y nietes de Plaza de Mayo, y de todo el país, por las luchas llevadas adelante en todos estos años. “No permitiremos que se ejerza ningún tipo de violencia sobre elles. Los pañuelos blancos son faro de nuestra revolución transfeminista. Los vamos a defender”, finalizaron.